La referencia estadounidense del petróleo, el WTI o "light sweet crude", alcanzó su nivel más alto desde diciembre de 2014 este martes al término de los intercambios europeos, impulsado por el retroceso de las reservas mundiales.
Durante la tarde, el barril de crudo Brent del mar del Norte para entrega en marzo vendía a US$68,52 en el Intercontinental Exchange (ICE) de Londres, o sea con un alza de 74 centavos respecto al cierre del lunes.
En el New York Mercantile Exchange (Nymex), el barril de "light sweet crude" (WTI) para entrega en febrero subía 93 centavos, hasta los US$62,66.
Poco antes, el WTI alcanzó los US$62,80, su máximo valor desde hace más de tres años. En ese mismo momento, el Brent llegó a los US$68,74, su precio más alto desde mayo de 2015.
El mercado aprovecha la disminución de reservas de crudo en el mundo, una bajada que se explica en parte por las medidas de los integrantes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios.
El cártel y otros 10 productores, entre ellos Rusia, fijaron a finales de 2016 unos objetivos para limitar la producción para 2017, y el acuerdo fue renovado hasta finales de 2018, lo que beneficia a los precios.
"Mientras veamos que las reservas estadounidenses bajan y que la OPEP respeta sus compromisos, el mercado estima que el barril todavía puede encarecerse", considera Gene McGillian de Tradition Energy.