Reactivar la inversión es uno de los principales objetivos del gobierno de acuerdo a sus metas planteadas, tarea que -tras cuatro años de contracción- representa un nuevo test para la administración.
Sin embargo, el desafío del Ejecutivo, "choca" con el otro gran objetivo de Hacienda, que apunta a reducir el déficit fiscal, y por ende acotar el gasto público. En esta línea, la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere), reveló que a marzo de 2018, los gobiernos regionales registraron su menor ejecución presupuestaria en programas de inversión en siete años, tras ejecutar un 16,4% de su presupuesto anual.
[ze_adv position="adv_300x100" ]
Durante los primeros tres meses del año, el gasto devengado dentro del Programa de Inversión de los Gobiernos Regionales llegó a $171 mil millones, de un total de $1 billón asignado de acuerdo a la Ley de Presupuestos 2018, lo que representa un 6,9 puntos procentuales menos de lo gastado en la misma fecha el año anterior.
Al 31 de marzo de este año, sólo tres de las 15 regiones subieron su ejecución respecto al año anterior lideradas por la Región de Magallanes que consignó una ejecución del 27% de su presupuesto anual en el mes equivalente a $16.694 millones. En segundo lugar se ubicó Tarapacá con la ejecución del 21,3% de su presupuesto por un monto de $8.833 millones en marzo de este año y por último, la Región de Aysén con el 18,4% que corresponde a un gasto de $10.013 millones.
[ze_adv position="adv_300x250-A" ]
Por el contrario, la Región de Atacama fue la que presentó la mayor baja en comparación a marzo de 2017 alcanzando sólo el 7,4% de ejecución con $4.433 millones, esto significa un menor gasto respecto del mismo período del año anterior donde llegó al 26,5% por un monto de $16.281 millones.
Ciclo político
De acuerdo a los expertos, la clave de la baja ejecución estaría en el menor incentivo de las autoridades de la administración, anterior, considerando que corresponde a los últimos meses de su periodo.
Así lo describe el economista y académico de la Universidad Gabriela Mistral, Erik Haindl, quien explica que "esto tiene que ver con el ciclo político, con el hecho de que los encargados del proceso que estaban antes, salieron y están recién entrando los nuevos".
Asimismo, la economista del ESE de la Universidad de Los Andes, Cecilia Cifuentes comenta que "es bien razonable que el cambio de gobierno genere atrasos por el proceso de cambio de autoridades y eso hace que todo avance más lento".
[ze_adv position="adv_300x250-B" ]
Por su parte, hay quienes ven que la reactivación estaría condicionada a otros objetivos de la administración de Piñera, como disminuir el gasto fiscal, hecho que podría complicar el gasto de los gobiernos regionales.
Benjamín Sierra, economista jefe de Scotiabank, pone sobre la mesa esta posibilidad explicando que "en esto primará mucho las directrices que vengan desde Hacienda, que de acuerdo a todas las señales y comentarios realizados por el propio Ministro en el ChileDay, habrá una reducción en el déficit fiscal, por lo que está claro que el tema del gasto público viene apretado y que por el lado fiscal no habrá ninguna ayuda para acelerar la economía, y esto no tiene nada de malo"
[ze_adv position="adv_300x250-C-net" ]
Aún así, los agentes coinciden en que esta situación debería retomar un mayor ritmo en lo que viene. Cifuentes comenta que "dado el objetivo del Gobierno Central de darle mucha prioridad a acelerar procesos de inversiones, yo creo que un buen test va a ser ver qué está pasando con los gobiernos regionales y sus proyectos de inversión".
Junto a esto la economista agrega que "en general en el gobierno anterior todo lo que fue inversión fue bastante modesto. En el fondo, se ejecutaron bien los presupuestos de gasto corriente, pero los de inversión siempre se subejecutaban y este gobierno entró con el objetivo de revertir esto a nivel macro".