Emblemáticos los dos, tanto el proyecto que modifica la Ley General de Bancos como el que crea la Comisión de Valores en reemplazo de la actual Superintendencia de Valores y Seguros corren el riesgo de quedar desplazados para marzo. Esto en medio de la intensa agenda legislativa que maneja el Congreso.
El Parlamento se encuentra sesionando de manera extraordinaria para lograr despachar antes del término del mes una serie de proyectos que han sido priorizados por el Gobierno: fortalecimiento y transparencia de la Democracia; así como el de partidos políticos; Reforma Laboral; cambios a la recientemente aprobada Reforma Tributaria; la iniciativa que repone la pena de cárcel en casos de colusión; Carrera Docente y agenda corta anti delincuencia.
Sin embargo, ninguno de los dos proyectos clave para el mercado de capitales está entre los priorizados. En el caso de la iniciativa que crea la Comisión de Valores, ésta se encuentra en sus últimos trámites, razón por la que se esperaba que estuviera despachada en enero. No obstante, el proyecto está siendo revisado en la Comisión de Constitución del Senado, instancia que analiza las facultades intrusivas, el procedimiento sancionatorio y la delación compensada contempladas en la reforma; pero al mismo tiempo está estudiando otros dos textos de la agenda priorizada.
El retraso de esta ley también implicará el atraso de la modificación a la Ley General de Seguros, cuyas propuestas de cambio serán revisadas por la Comisión de Valores.
A la busca de espacios
Para fines de diciembre se esperaba que el Ministerio de Hacienda ingresara la reforma a Ley General de Bancos (LGB); sin embargo, a fines del ejercicio lo retrasó para los primeros días de enero. Hoy, la expectativa es encontrar un espacio dentro de la agenda legislativa para enviarlo.
A esto se suma que el equipo conformado entre la Superintendencia de Bancos y el Ministerio Hacienda está afinando la redacción del documento, por lo que existe el riesgo que el envío quede relegado para marzo.
El proyecto se enfocará, en principio, en requerimientos de capital, la gobernanza de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) y temas de resolución bancaria a analizar; sin embargo, tras el informe entregado por el Grupo de Trabajo para el análisis de una nueva LGB, el mismo ministro de Hacienda señaló que analizaría su contenido para afinar la iniciativa, pues el texto proponía abordar temas de supervisión consolidada y shadow banking (banco en la sombra), además de dar mayor independencia institucional a la SBIF a través del nombramiento de un cuerpo colegiado, reemplazando así la figura del superintendente único.