Fueron 222 millones de euros (US$264 millones) los que el Paris Saint-Germain (PSG) puso sobre la cancha del Barcelona para quedarse con Neymar. A raíz de estos ingresos, el club español aprobó un presupuesto histórico para la temporada 2017-2018, de 897 millones de euros (US$1.068 millones), superando en 189 millones el erario anterior (US$225 millones).
En Europa, el presupuesto de los clubes de fútbol da qué hablar todos los años. Sin embargo en Chile no es obligatorio reportarlo. Hasta ahora. A partir del 1 de enero, la Conmebol exigirá a todos los clubes latinoamericanos estándares mínimos, tales como que hagan públicos sus estados financieros y que presenten su presupuesto, de lo contrario, no podrán participar en torneos oficiales como la Copa Libertadores.
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Justamente Sudamérica era el último continente que faltaba en implementar esta normativa de la FIFA, dice Cesar Grafietti, superintendente de crédito de Itaú BBA, quien desde 2011 coordina el equipo autor del estudio "Análisis Económico Financiero de los Clubes de Fútbol Brasileños", en el que se hace una evaluación completa de las finanzas de los mayores equipos de fútbol del gigante latinoamericano.
En esta oportunidad, el informe se amplió, bajo el nombre "Fútbol Sudamericano: Una visión sobre Gobierno y Finanzas", donde se hizo un análisis comparado con los balances de clubes chilenos, brasileños, colombianos y argentinos.
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Según las cifras recopiladas, entre las cuatro naciones consignadas en el reporte, los equipos locales suman por lejos los menores montos netos, tanto en ingresos, como en Ebitda, inversiones, gastos y costos. Brasil gana por goleada con los números más altos. No obstante, cuando se mide el ingreso de los clubes y se compara con el Producto Interno Bruto (PIB) de cada país, los equipos chilenos toman posición más adelante en la región (ver tabla): lidera River Plate con un ingreso equivalente al 0,0190% del PIB de Argentina; luego Atlético Nacional (0,08183% del PIB de Colombia); Boca Juniors (0,0161%); Colo Colo (0,0082%); Universidad de Chile (0,0075%), y Palmeiras (0,0075%).
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"Los números de los clubes chilenos son menores, porque el tamaño de la economía es menor. La diferencia principal se refiere al tamaño del país, porque cuando ves los ingresos de los clubes chilenos comparados con el PIB, es grande, pero nominalmente se ve pequeño", argumenta Grafietti.
Los resultados
El análisis de Itaú consideró los estados financieros de 2016 de tres clubes chilenos: Colo Colo (Blanco y Negro), Universidad de Chile, y Universidad Católica. Entre ellos, el líder indiscutido en ingresos fue el equipo del cacique (US$20 millones); le siguió la U (US$19 millones) y en tercer lugar, los cruzados (US$17 millones).
Si bien, tales montos estuvieron lejos de los US$104 millones que reportó el líder en Argentina -River Plate- o el top 1 de Brasil: Palmeiras con US$132 millones, sí hubo un aspecto donde los chilenos alcanzaron el podio: el peso de la publicidad al interior de sus ventas. De hecho, en Colo Colo mientras más de la mitad de los retornos provino del avisaje, en Palmeiras fue menos de un tercio. En los clubes argentinos, en tanto, el principal aportantes se resumió en "otros", lo que dijo relación, principalmente, con las entregas de los socios; ítem que en los equipos chilenos fue prácticamente inexistente, con excepción de la U. Lo mismo ocurrió con el aporte anotado por la venta de atletas que a nivel regional fue sumamente relevante en 2016, mientras en Chile sólo destacó en el caso de la Universidad Católica.
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"El fútbol sudamericano vende muchos más atletas de los que compra", señala Grafietti. Y así lo revelan las cifras: si en 2015 fueron 2.153, los jugadores que adquirieron los equipos de la región, en 2016 esa cifra aumentó a 2.188. Las ventas, no obstante, fueron mayores, pasando de 2.267 a 2.548 en un año.
Los montos, en tanto, reportaron un incremento aún más exponencial que los pases. Mientras en 2015 las adquisiciones de la región representaron US$99,4 millones, en 2016 ese dato subió a US$182,6 millones. Las enajenaciones de jugadores subieron de US$462,2 millones a US$626,7 millones en 2016.
Al revés del disímil origen de los ingresos del fútbol regional, en la categoría de costos y gastos fue la remuneraciones de atletas la que representó la mayor parte de este ítem en todos los clubes. Palmeiras, por ejemplo, desembolsó US$56 millones en pagar a jugadores; River Plate, US$54 millones, y Universidad de Chile, US$11 millones. En Chile, le siguió Colo Colo con US$8 millones, y Universidad Católica con US$7 millones.
Respecto al Ebitda, en tanto, el año pasado Colo Colo y los cruzados terminaron empatados con US$4 millones, mientras que los azules marcaron pérdidas de US$2 millones. En la otra vereda se situó Brasil: el Palmeiras y Flamengo alcanzaron US$45 millones cada uno, liderando en la región. En Argentina el triunfador fue River Plate, con US$37 millones.
