Durante la primera administración de la Presidenta Michelle Bachelet, una de las críticas más complejas se dio a raíz de la respuesta estatal ante el terremoto y tsunami del 27F. A más de siete años de ocurrido, las autoridades han sacado lecciones que redundan en la integración de un Sistema de Alerta de Emergencia (SAE), trabajo conjunto de la Onemi y la Subtel.
Rodrigo Ramírez, subsecretario de Telecomunicaciones, da cuenta del estado en que se encuentran las redes y cómo hacen frente a periodos de emergencia. "Existe una evaluación positiva, en el sentido de que las empresas del sector dan cumplimiento al Decreto Supremo N°60, de habilitación de toda la infraestructura crítica para situaciones de emergencia, en la que aquella calificada en nivel 1, debe contar con autonomía de funcionamiento de 48 horas", dice Ramírez. Por otro lado, la calificada con nivel 2 debe garantizar autonomía de cuatro horas. "Esto permite mantener 'arriba' las comunicaciones en los sectores definidos como clave para el servicio, de acuerdo al tipo de emergencia dada", agrega la autoridad gubernamental.
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¿Para qué están preparadas las redes?
-Antes que nada, las redes a nivel mundial no están hechas para soportar situaciones de catástrofes o desastres naturales, como por ejemplo un terremoto magnitud 9. En otras palabras, y a modo de ejemplo, es sano mencionar lo sucedido con las redes de telecomunicaciones durante los incendios forestales que afectaron a la zona centro-sur de nuestro país, contexto en el que la infraestructura fue permeable al impacto del siniestro que golpeó la ruralidad de tres regiones de Chile, pero solo porque el fuego dañó la red de alimentación de datos y energía de las antenas, y nos las antenas propiamente tal. Eso ayudó a dar rápida respuesta en la recuperación de las comunicaciones.
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¿Cómo debiera actuar la población en caso de emergencia?
-Dadas las particularidades de un país como Chile, acostumbrado a frecuentes situaciones de emergencia, la autoridad -y particularmente la Subtel- , aconseja a la población el uso de mensajería de textos con el fin de no mermar la capacidad de conectividad factible de alcanzar en situaciones de adversidad provocada por eventos naturales u otros. O bien, instruir acciones concretas a las empresas, tales como tareas de desmalezamiento permanente de los sitios donde se ubican las antenas de telecomunicaciones, con el propósito de amortiguar la propagación de los siniestros de fuego, y así, garantizar la operatividad de los sistemas de comunicaciones, que fue precisamente lo que se hizo en forma previa a los siniestro de fuego de enero de 2017 y que permitió que la infraestructura no recibiera un impacto mayor.
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¿Qué temas hay pendientes?
-La aspiración es alcanzar condiciones que permitan la redundancia y resiliencia de las redes y un aumento en la implementación de la red de fibra óptica, tanto en zonas urbanas como rurales y apartadas, con el fin de mejorar la capacidad y calidad del servicio. También se requiere la ampliación de la infraestructura de telecomunicaciones calificada como crítica.
¿Qué países ve como ejemplo para desarrollar esta área?
-Japón es un país con características muy similares al nuestro en cuanto a sismicidad. Lo importante allí ha sido la cultura de desarrollo tecnológico pero, fundamentalmente, la voluntad de asumir que el acceso a esas tecnologías solo es posible con el despliegue de la infraestructura adecuada y necesaria, sistemas de respaldos, redes redundantes, etcétera.
Nuestro principio es que en la actualidad, las telecomunicaciones, así como a necesidad de comunicarse durante eventos de emergencia, es clave. Se ha transformado en un recurso tan básico como el agua.
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En ese marco, ¿cómo ha sido la participación de los operadores?
-Las empresas han tenido disposición a colaborar, incluso áreas como el retail (que no está bajo nuestro rol de regulador), ha mostrado compromiso y ha trabajado de manera mancomunada con Subtel. Eso ha quedado de manifiesto mediante la constitución de mesas de trabajo que han permitido una mejor coordinación, en vista de las instancias de emergencia que enfrenta nuestro país frecuentemente, tales como terremotos, tsunamis, incendios, aluviones e inundaciones, entre otras. También, es importante destacar que este año las tres empresas más grandes de la industria suscribieron el convenio "nos importa" de la GSMA junto a Cepal, iniciativa internacional privada para dar apoyo de comunicaciones ante eventos de emergencias.
