El año pasado Banco Santander puso énfasis en la contención costos. De eso dio luces en sus resultados al cuarto trimestre de 2017, donde comentó a los inversionistas que los ingresos netos atribuibles a los accionistas aumentaron 24% en una comparación año contra año. ¿La razón? En su presentación, Santander aclaró que este incremento interanual se debió principalmente a una expansión en los márgenes, comisiones y costo de provisión, lo que fue "complementado con un control estricto de los costos".

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En ese sentido, Santander fue el banco que más redujo sus cajeros el año pasado: 331 unidades, según cifras de la Superintendencia de Bancos (SBIF) a noviembre. Le siguió BBVA con una disminución de 45 ATM.

Claudio Melandri, gerente general y country head de Santander, aclara que la red de cajeros que tiene la entidad "cubre ampliamente las necesidades transaccionales de nuestros clientes. No obstante, la baja se explica por convenios puntuales, donde las cifras de cierre de la licitación no resultaron atractivas para nosotros".

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Santander también fue el banco que más redujo sus sucursales en 2017 considerando que cayeron en 49 según su presentación (51 según SBIF). Esto ocurre en medio del fin de la banca Banefe. Sin embargo, Melandri enfatiza el crecimiento del formato Work/Café: "durante 2018 seguiremos expandiendo este modelo de oficinas en todo Chile, ya que ha sido tremendamente exitoso".

Por otro lado, Santander fue el segundo banco que más redujo personal en 2017, considerando que los empleados disminuyeron en 282 personas hasta 10.376. En términos de cantidad, fue sólo superado por la baja de 363 personas que registró BCI en su planilla. Security se posicionó en el tercer lugar bajando su balance en 35 empleados.

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Al respecto, Melandri detalla que "la estructura de costos de los bancos está fuertemente indexada a la inflación y al tipo de cambio, por lo que la búsqueda de eficiencia es un ejercicio permanente. Estas modificaciones se hicieron apalancadas por la estrategia digital de Santander, lo que nos permitió aplanar la estructura, logrando reducir los costos y aumentar la productividad y agilidad".

Santander no sólo redujo cajeros, empleados y sucursales, también bajó sus provisiones y el costo de transporte de valores (-17,7%). Sobre esta última baja, el gerente general del banco detalla que tiene directa relación con la reorganización del parque de cajeros automáticos. "La mayoría de los cajeros que han sido retirados no se encuentran en sucursales", apunta.

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Adicionalmente, sobre la reducción de provisiones puntualiza que "forma parte de nuestra estrategia digital, ya que se genera una mayor eficacia en los modelos avanzados de evaluación de riesgos, sumado a la prudencia que demuestran los clientes al momento de determinar cupos y montos al auto-atenderse en canales digitales".