Una capacidad a treinta millones de pasajeros de aquí a 2020 es la ambiciosa meta que se autoimpuso la concesionaria europea Nuevo Pudahuel, operadora desde octubre del año pasado del Aeropuerto de Santiago, principal terminal aéreo del país.
El consorcio, conformado por Aéroports de Paris, Vinci Airports y Astaldi Concessioni, va bien encaminada en ese objetivo, pues el año pasado finalizó con un alza de 7,2% en su flujo total de pasajeros, con 17.230.185 personas transportadas.
De esta forma, SCL se acerca al número de pasajeros que utilizan el aeropuerto Internacional Jorge Chávez, de Lima, el que hace un par de años le arrebató el tercer lugar regional, posicionando a la capital peruana como uno de los hub o centros de conexión más importantes de Sudamérica.
El año pasado, el terminal limeño transportó un total de 17.575.919 pasajeros, apenas 1,5% más que el aeropuerto de Santiago, equivalente a 262 mil personas.
La pelea por el tercer lugar regional es vista con distancia por los dos aeropuertos que dominan la región: El Dorado, en Bogotá, Colombia; y Guarulhos, en Sao Paulo, Brasil.
El Dorado, convertido en el principal centro de conexión de Sudamérica con El Caribe y Norteamérica, movilizó el año pasado a 30.235.672 personas, con un incremento de 9,8% al compararlo con los 27.534.000 pasajeros que transportó en 2014.
Mientras, el Aeropuerto Internacional de Guarulhos, de Sao Paulo, transportó a 38.985.000 de pasajeros en el mismo periodo.
Esta terminal es la más importante en cuanto a vuelos internacionales, no sólo en Brasil sino que en toda Sudamérica. Esto porque muchos de los vuelos de larga distancia realizan una escala en Guarulhos, especialmente los provenientes de Europa.
De entre los mayores terminales aéreos de la región, Guarulhos fue el único que perdió espacio respecto a 2014, con un descenso de 1,4% en comparación a los 39.538.000 pasajeros transportados en 2014.
Está bastante más atrás, pero también crece. El Aeropuerto Internacional de Ezeiza, situado en Buenos Aires, trasportó en 2015 a 9.127.908 personas, anotando un incremento de 6,1% si se compara con la cifra del año anterior, mientras que el Aeroparque Jorge Newbery -aeropuerto de tráfico nacional y regional ubicado en la capital transandina- movilizó a 11.052.861 de personas, un 7,5% más que en 2014.
Chile despega
Una explosión. A eso equivale el crecimiento que ha experimentado el tráfico aéreo de pasajeros en los últimos cinco años en Chile, que casi se duplicó entre 2010 y 2015, pasando de 11 millones de pasajeros, a 18 millones, según cifras de la Junta Aeronáutica Civil (JAC).
Un factor importante a considerar en los próximos años es que la concesionaria Nuevo Pudahuel está construyendo el nuevo terminal internacional de pasajeros, que tendrá 175 mil metros cuadrados con una inversión de US$900 millones, lo que aumentará la capacidad total a 30 millones de pasajeros por año.
La misión del concesionario Nuevo Pudahuel es clara: convertir al aeropuerto capitalino en uno de los mejores de la región. Sin embargo, la competencia no será nada de fácil.
