Pese a que la decisión presidencial de la mayoría de los partidos aún no está tomada y se espera que marzo sea el mes clave tanto para la Nueva Mayoría como para Chile Vamos, los topes de los gastos electorales de cara a las elecciones ya fueron publicados por el Servicio Electoral.

Según la norma, 200 días hábiles antes de cada elección, el Servel debe determinar cuánto es lo máximo a desembolsar por cada candidato según las fórmulas que contemplan las nuevas leyes electorales. Así fue como el 30 de enero pasado, el servicio dio luz verde a los montos que podrán gastar los aspirantes a La Moneda, al Congreso y también a los Consejos Regionales que participen de los comicios del 19 de noviembre.

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Las cifras más altas son para las presidenciales, en las que se contemplan, además de la primera vuelta, las primarias del 2 de julio y un eventual balotaje para el 17 de diciembre. Así, los abanderados de cada partido podrán gastar casi $5.665 millones de cara a la votación de noviembre.

Para los que quieran medirse previamente, como han manifestado, por ejemplo, los dos candidatos oficiales de la NM: el senador y abanderado radical Alejandro Guillier y el ex Presidente y carta del PPD, Ricardo Lagos, tendrán como tope en la primarias $565.487.753 que equivale al 10% autorizado para las elecciones generales.

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En el caso de que algunos de ellos pase a segunda vuelta y compitiera con el mejor posicionado de la derecha -que hoy sería el ex Presidente, Sebastián Piñera- el techo para desembolsar será de casi $3.770 millones.

Pese a las abultadas cifras, en estas elecciones debuta un nuevo tope que corresponde a la mitad de lo permitido en las votaciones de 2013 y que se fijó en la Ley de Fortalecimiento y Transparencia de la Democracia.

Sin embargo, una de las dudas que dejó la nueva normativa y que ha sido discutida en el Consejo Directivo del Servel, es qué pasa con los gastos que se realizan en el período previo a las inscripciones oficiales, que en el caso de las primarias es el 2 de mayo y para los que irán directo a la papeleta de la primera vuelta, el 21 de agosto. "Consideramos que es necesario regularizar no sólo la precampaña, sino también la post campaña", comentó el Presidente del Consejo Directivo, Patricio Santamaría.

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Así, el Servel le planteó al Gobierno y al Congreso una revisión legislativa en esta materia, pues en la actualidad sólo se contempla para los efectos de poder recaudar aportes que los aspirantes a Presidente de la República, tengan un período de campaña de 200 días de corrido previo al día de la elección definitiva, dejando de lado la situación de los candidatos parlamentarios, de Cores e incluso de los participantes de las muncipales.

"Hoy la campaña termina el día de la elección, pero todos los gastos que se hacen con posterioridad como, por ejemplo, el retiro de la propaganda en lugares autorizados, todos los gastos que puedan incurrir en el proceso de calificación de las elecciones en los tribunales regionales o el tribunal calificador de elecciones, también debería estar considerado como gasto desde nuestro punto de vista", señaló Santamaría.

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Topes parlamentarios

Para los candidatos a un cupo en el Senado las cifras van desde los $524 millones para los compitan por la región de Valparaíso, versus los casi $90 millones que tendrán como límite los que busquen un escaño en Aysén. Esto, considerando que en el 2017 se renueva la mitad de la Cámara Alta, pues los comicios se realizarán sólo en la regiones impares.

En el caso de la Cámara de Diputados desde el próximo año aumentarán a 155 parlamentarios. Los máximos gastos electorales los lideran los candidatos que disputen uno de los 8 cupos del distrito 20 que contempla a Concepción, Talcahuano y Tomé, entre otras, pues podrán desembolsar un poco más de $414 millones. En la vereda contraria, los aspirantes a diputado del distrito 18 en la región del Maule solo podrán gastar en sus campañas $56 millones.