En medio de períodos probatorios, diligencias judiciales, declaraciones de testigos, aumentos de capital y una elección de directorio que tendrá que repetirse -todo esto se conoce como el Caso Cascada-, la mayoría de las sociedades controladoras sobre SQM entregaron sus resultados ayer, los que no hicieron otra cosa que reflejar el mal momento que vive el subyacente.

En efecto, la ganancia de SQM en el primer trimestre anotó una caída de 46,6% interanual, como resultado de un escenario en que los precios de los fertilizantes se han mantenido deprimidos, luego de que se quebrara el cartel del potasio BPC.

Es así como aguas arriba, la situación se replicó incluso con más fuerza, pese a los esfuerzos de la administración por bajar costos.

En el caso de Calichera, que posee directamente el 19,67% de las acciones de SQM, registró una reducción de 61% en la última línea. Oro Blanco, dueño del 88,6% de Calichera, registró un descenso de 82%. El resultado de Norte Grande bajó 87%.

Nitratos y Potasios, a su vez, tuvieron una caída de 84% y 79% en la utilidad.

La situación debiera continuar difícil en los próximos meses, de acuerdo a lo que manifestaron en SQM hace unos días en un conference call .

Patricio de Solminihac, Chief Operating Officer de la firma, afirmó en esa oportunidad que en el primer trimestre el precio del yodo se ha ubicado en el rango de los US$40-US$45 por kilo, “y nosotros pensamos que el resto del año el precio se erosionará un poco más”.

Explicó que este mercado en particular se ha visto con una baja de tarifas por una fuerte competencia. Los volúmenes durante los primeros tres meses fueron menores a los vistos hace un año. En todo caso, no todo está perdido. El ejecutivo espera que el volumen de ventas de la línea de negocios Nutrición Vegetal de Especialidad se eleve 15% interanual durante este año.