Los fanáticos de la estrella del pop Katy Perry despertaron el viernes con un correo electrónico en sus teléfonos inteligentes: su nuevo single, "Chained to the Rhythm", ya está disponible para escucharlo a través del servicio de transmisión en línea.
Además, vieron otro recordatorio en Facebook, donde Perry cuenta con más de 70 millones de "me gusta". Y si eso no fuese suficiente, los fanáticos de Los Ángeles y Londres vieron en su traslado diario un saludo a través de carteles publicitarios.
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¿Lo mejor para Perry? Todo esto es gratis. Spotify Ltd., el servicio pago de música más popular del mundo, correrá una campaña promocional de meses antes del lanzamiento en el verano boreal del quinto álbum de estudio de Perry, el primero desde su exitoso disco "Prism" de 2013. Los encargados de mercadeo de la firma continuarán trabajando con la cantante para probarle que pueden ayudarla a vender discos y entradas a conciertos mejor que cualquier estación de radio o servicio de transmisión rival.
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"Ellos fueron quienes dijeron, 'Queremos hacer de esto una parte importante de lo que estamos haciendo, queremos darte todos los niveles de apoyo'", dijo Martin Kirkup, socio de Direct Management Group, que representa a Perry. "No pedimos un cartel publicitario. Ellos lo ofrecieron".
En el pasado, artistas han criticado a Spotify, con sede en Estocolmo, por las regalías que paga y el uso de su música en su plan gratuito –Taylor Swift se negó a ofrecer su nuevo álbum a través del servicio a fines de 2014–. En medio de sus enfrentamientos con las disqueras y las preparaciones para una oferta pública inicial, la empresa dedicó el año pasado a construir equipos y servicios para mejorar su relación con el sector.
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"Hemos pensado mucho acerca de cómo posicionarnos y ser un mejor socio para el artista", dijo en una entrevista Stefan Blom, director de contenido de Spotify. "Antes no teníamos un equipo de mercadeo de artistas y ahora lo tenemos. Eso fue una consecuencia directa de los diálogos entre Troy y yo y con los representantes y empresas discográficas de los artistas".
Figura del sector
Troy es Troy Carter, gerente veterano y ahora titular global de servicios de creación de Spotify. Oriundo de Filadelfia, Carter comenzó su carrera trabajando con raperos como Will Smith, Eve y Nelly, antes de trasladarse a Los Ángeles y suscribir a la clienta que lo convertiría en un gigante del sector: Lady Gaga.
Cuando se unió a la compañía en junio como titular de enlaces con la industria musical, Carter ya era inversionista de Spotify a través de un fondo angelical. Reclutó a un pequeño equipo de ejecutivos de empresas discográficas, publicistas musicales y agencias de avisos para ayudar a Spotify a responder mejor a las necesidades de los artistas.
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"Esa es mi tarea", dijo Carter en una entrevista. Spotify ha comenzado a ver resultados.
Difícil de ignorar
El tamaño de Spotify hace que para un artista sea difícil de ignorar. El servicio superó los 100 millones de usuarios el año pasado, incluyendo a más de 40 millones de suscriptores, muchos de los cuales pagan US$9,99 mensuales. Sus más de 60 millones de usuarios del servicio gratuito escuchan avisos publicitarios y no disfrutan de las mismas funcionalidades. Sin embargo, Spotify sigue perdiendo dinero debido a los altos costos de licenciamiento y las necesidades de cerrar nuevos acuerdos con las más importantes disqueras para mantener su acceso a los principales artistas.
En el primer semestre de 2016, los servicios de transmisión fueron la mayor contribución independiente a las ventas del negocio de la música de Estados Unidos, superando los ingresos de iTunes, Amazon y las compras físicas, de acuerdo a la Asociación de la Industria Discográfica de Estados Unidos.
Y aunque diariamente la radio aún alcanza a muchas más personas que Spotify, las transmisoras no tienen el mismo nivel de datos de sus oyentes. Spotify puede entregar a los artistas una gran cantidad de información acerca de quiénes los escuchan, dónde y cómo.