Durante la jornada de ayer, la tasa del bono del Tesoro de Estados Unidos superó el 2,9%, esto mientras los inversionistas se alistan para la licitación de US$258.000 millones en deuda soberana que se realizará esta semana.

Al cierre de las operaciones, sin embargo, la tasa soberana retrocedió hasta el 2,89%.

La evolución de estas subastas, explican en el mercado, medirá el interés de los inversionistas internacionales después de una fuerte liquidación, que fue el factor que presionó la tasa del Tesoro al alza en la mañana.

"Si vemos subastas débiles, en particular para los papeles a 2, 5 y 7 años, se confirmaría que al mercado le preocupa el panorama fiscal de Estados Unidos este año", dijo John Hardy, estratega de Saxo Bank.

El Departamento del Trabajo de Estados Unidos aumentó sus emisiones de deuda en preparación para un déficit más alto por la reforma tributaria y tras un acuerdo presupuestario que subirá el gasto federal en los próximos dos años.

Hoy se licitará una nota a cinco años por un total de US$35.000 millones, mientras que mañana será el turno de un papel a siete años, por un total de US$29.000 millones.

Lo que suceda con las tasas de interés en la primera economía del mundo está al centro de las miradas, mientras que los inversionistas temen que otra alza pronunciada pueda provocar otro acceso de volatilidad en los activos de riesgo, como hace unas semanas.