Toyota dijo este jueves que realizará una revisión global de 2,89 millones de vehículos ante la posibilidad de que sus cinturones de seguridad queden dañados por un componente de metal del dispositivo en el caso de un accidente.
En un correo electrónico, la automotriz líder en ventas mundiales sostuvo que el llamado a revisión involucra al modelo RAV4 SUV producido entre julio del 2005 y agosto del 2015 y que se vendió en todo el mundo, y al modelo Vanguard SUV fabricado entre octubre del 2005 y enero del 2016 y que se comercializó en Japón.
La medida de Toyota Motor Corp incluye a 1,3 millones de autos en Norteamérica, junto con 625.000 vehículos en Europa y 434.000 unidades en China, 177.000 en Japón y 307.000 en otras regiones.
La automotriz dijo que añadiría cubiertas de resina a los marcos de metal de los cinturones de seguridad de todos los autos afectados para evitar que estas piezas corten el dispositivo en un eventual accidente, luego de recibir reportes sobre incidentes de este tipo en los asientos traseros de los vehículos.
Toyota dijo que no podía determinar si estos reportes estaban vinculados a lesiones o muertes en accidentes.