El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dio hoy un ultimátum a Londres para que haga progresos respecto a la factura de la separación y la frontera física con Irlanda, si quiere empezar a negociar en la segunda fase del brexit.
Para evitar ambigüedades con el calendario, Tusk le he dejado claro a la primera ministra británica, Theresa May, que los progresos deben llegar a más tardar a principios de diciembre, durante una reunión bilateral en la ciudad sueca de Gotemburgo.
La Unión Europea pasará a la segunda fase de las negociaciones en la salida del Reino Unido y las futuras relaciones, solo si hay suficientes progresos en materias como la factura del divorcio, la frontera con Irlanda y los derechos de los trabajadores.
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"Estamos de acuerdo en que se ha logrado un buen progreso, se debe hacer más, pero somos claros y yo soy clara en que lo que necesitamos es avanzar juntos y, de esa forma, podemos asegurar que conseguiremos el mejor acuerdo para el Reino Unido y la Unión Europea", declaró May.