El general director de Carabineros, Bruno Villalobos, estuvo dos semanas en silencio. No obstante, ayer apareció para referirse a la investigación que tiene cuestionada a su institución por la denuncia del Ministerio Público sobre la presunta manipulación de pruebas en contra de ocho comuneros mapuche a quienes se les atribuyó responsabilidad por la quema de camiones en el sur del país en el marco de la denominada Operación Huracán.
Villalobos anunció ayer las primeras consecuencias administrativas de este caso y que involucran a cuatro funcionarios de Carabineros. "He tomado la decisión de llamar a retiro al actual general Marcelo Teuber, hasta el año pasado jefe de la unidad de inteligencia de La Araucanía, además del mayor (Patricio) Marín, el capitán (Leonardo) Osses y terminar el contrato con el empleado civil, el ingeniero Álex Smith", dijo el general director.
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La decisión, según afirmó Villalobos, la tomó luego de una reunión que sostuvo la autoridad con el general Julio Pineda -quien encabeza la investigación administrativa de este caso- para "darle objetividad y transparencia" al proceso.
De los cuatro, el funcionario de más alto rango es Teuber, quien el año pasado -cuando era coronel- dirigía la Unidad de Inteligencia Operativa Especializada (UIOE) en Temuco. A fines del año pasado fue ascendido y pasó a ser el general jefe de la unidad de Control de Orden Público en La Araucanía. A Teuber lo sigue Patricio Marín quien es al actual mandamás de la UIOE de Temuco.
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El mayor Osses es uno más de los oficiales de inteligencia de la zona quien también estuvo involucrado en los peritajes que el año pasado que terminaron con el arresto de los ocho comuneros mapuche, los mismos que días atrás fueron sobreseídos por el Tribunal de Garantía de Temuco y cuya decisión fue apelada por el Gobierno.
Osses es indicado, según la declaración del civil Álex Smith ante la fiscalía, como su principal interlocutor en la institución. Este último es el creador del polémico software "Antorcha" que desde enero de 2017 trabaja en labores de inteligencia para la policía uniformada. Dicho programa fue el que utilizó la UIOE de Temuco para interceptar los celulares de los ocho comuneros mapuche. Los mensajes extraídos fueron la principal prueba utilizada para inculpar a los imputados del caso.
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"Antorcha" es justamente donde el Ministerio Público ha puesto especial atención ya que es la fuente de donde surgieron los mensajes que, de acuerdo a varios de los peritajes, se sospecha que fueron manipulados e implantados en los teléfonos de los comuneros.
Desde que estalló este caso que tiene enfrentado a Carabineros y al Ministerio Público la presión estuvo sobre el mismo Villalobos. Varios parlamentarios pedían su renuncia debido a la gravedad del asunto. Pese a todo, La Moneda optó por mantenerlo en el cargo y esperar a "la verdad jurídica" para tomar medidas al respecto.
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Ayer el general director reforzó la tesis de que esto se trata de "un caso puntual". Junto con eso evitó referirse a si esta desvinculación se relaciona con la sospecha de las pruebas manipuladas y dijo "no tener antecedentes" del avance de la investigación que lidera el fiscal regional de Aysén, Carlos Palma. De esta misma forma que su decisión no tiene ningún vínculo con el proceso judicial en curso y sólo se trata de una medida "administrativa", es decir, del sumario interno que tiene Carabineros y que lidera Pineda.
La defensa de la moneda
Ayer el Gobierno justificó su decisión de querellarse contra quienes resulten responsables por la presunta obstrucción a la investigación y falsificación de instrumento público, en el marco de la Operación Huracán.
El vocero (s) de Gobierno, Omar Jara, enfatizó que el Ejecutivo "no duda de las instituciones del país" y que "no está a favor ni de Carabineros, ni del Ministerio Público". Por eso Jara aseguró que el único objetivo de las acciones judicial iniciadas por La Moneda en este caso es "esclarecer los hechos" y "sancionar a los responsables".
En tanto, ayer el líder de la Coordinadora Arauco Malleco y uno de los ex imputados de la operación Huracán, aseguró que la investigación "se cae a pedazos" y que lo ocurrido es "la punta del iceberg". "Toda esta operación se basa en la mensajería que se ha visto que ha sido implantada, se supone por personal de Carabineros", concluyó Llaitul.