Fernando Claude y Amory Uslar se fueron hace 12 años a Chiloé a vivir de la tierra. No es una metáfora: es literal. Esta pareja decidió transformarse a la autosustentabilidad y puso sus recursos en un terreno de seis hectáreas en Chepu, un lugar a 20 minutos de Castro, en Chiloé.
El objetivo era vivir de lo que ellos fueran capaces de producir valiéndose de la naturaleza. Por ejemplo, el agua que consumen viene de la lluvia, y la electricidad, del sol. Hicieron un invernadero para sus plantas, también levantaron un gallinero y vivieron del trueque.
Hoy ese estilo de vida lo abrieron al turismo como Chepu Adventures, un hotel para no más de 10 personas, que vive del mismo principio fundacional. "La naturaleza es nuestro principal proveedor, junto con eso les entregamos a nuestros clientes una experiencia sustentable e interactiva y fijamos límites, porque no podemos ser sustentables si las personas no son sustentables".
Eso significa, por ejemplo, que un huésped no puede consumir más que 40 litros de agua al día para todo su consumo. Y para eso tienen sistemas electrónicos que le indican a cada persona cuánta agua consume cada vez.
Justo por esta metodología es que Chepu Adventures logró el premio World Responsible Tourism Award 2013, por la conservación del agua.
Pero además, Chepu Adventures es uno de los 40 hoteles u hospedajes que consiguieron el sello S de sustentabilidad que entrega Sernatur con respaldo de la Mesa Nacional de Sustentabilidad Turística. Y esta, a su vez, es una política pública que nace del Programa de Turismo Sustentable, iniciativa público privada articulada por Corfo, Subsecretaría de turismo, Senatur y Fedetur.
La idea era generar un elemento que distinga a los servicios de hospedaje que tienen políticas de sustentabilidad en tres aspectos: ambiental, social y económica. Con este sello se reconoce este esfuerzo por tener buenas prácticas, lo que hace a su marca más competitiva a ojos de los turistas que hoy buscan estas características a la hora de planificar sus viajes.
Para acceder a este sello las empresas deben postular y participar de un proceso en que estas prácticas se validan y acreditan. Algunas, incluso, pueden postular a becas que les permiten avanzar hacia el sello.
En lo concreto ahora es que, además de Chepu Adventures, que calificó con puntaje 7 (el máximo para obtener el sello), hay otros 39 destinos sustentables para conocer en Chile. La mayoría se concentra en el sur, principalmente desde la Araucanía hasta la Patagonia. Pero todos los escenarios clásicos para el turismo en Chile tienen algún recinto con sello S.
Otro que calificó con 7 es Euro Charles Club, en la región del Maule. Su alta calificación se debe a su huerto e invernadero (auto-abastecimiento), criadero de gallinas colloncas (mapuches), un taller de confección y venta de artesanías (se puede ver cómo los artesanos trabajan) y calefacción con caldera a biomasa (con muy bajas emisiones). ¿Y el precio? Desde $30 mil a $75 mil, dependiendo de la cantidad de personas.
Maison Nomade Bed & Breakfast, también con nota 7, está en Pucón y se caracteriza por un huerto medicinal e invernadero orgánicos, sistemas de ahorro energético, compostaje de residuos orgánicos y sistema de reciclaje. Además tiene una tienda/taller de artesanías locales y productos orgánicos.
Ñamku Lodge, en Curacautín, logra la máxima calificación por dar valor al patrimonio natural y cultural. También por su rescate de expresiones tradicionales mediante Fair Trade, contratación de personal de la propia zona y apoyo a emprendedores locales en el desarrollo de iniciativas turísticas. El lodge usa tecnologías que disminuyen sus impactos sobre el entorno y utiliza un 90% de productos de origen o fabricación local.
RC Decoart, una casa emplazada en un circuito patrimonial de Valparaíso (cerca de la casa de Neruda, La Sebastiana, y al lado del museo A Cielo Abierto), también tiene un 7. Eso gracias a su link con la cultura, hace exposiciones permanentes de artistas locales; y a su sistema de iluminación led y solar en todo el hotel.
EcoCamp Patagonia hace gala de su sello S con nota 7 gracias a que es el primer alojamiento en Chile y Patagonia certificado con la ISO14001. Utiliza energía renovable para la electricidad y es 100% carbono neutral desde 2008. Tiene los baños de compost más australes del mundo. Todas estas decisiones están bajo el lema "no deje rastro" en cada aspecto de su operación. Tarifa fácil o más económica: US$1.403 por cuatro días.
En el norte del país también hay S. La tiene el hotel Alto Atacama Desert Lodge. Obtuvo nota 6 por su diseño que mimetiza sus instalaciones con el entorno, generando un bajo impacto visual. También aquí se practica el reciclaje y tratamiento de aguas. Además se prioriza mano de obra y proveedores locales y su restaurante Caur incorpora productos locales. También aplica el lema "no deje rastros" para sus excursiones y permite a estudiantes locales realizar prácticas profesionales aquí. Una habitación doble cuesta mínimo US$560.
La lista sigue y se la puede encontrar completa en http://www.chilesustentable.travel/distincion.