La vitamina D, conocida como la “vitamina del sol”, a menudo pasa desapercibida a pesar de su papel vital en nuestro bienestar. Esta molécula, no solo es esencial para la salud ósea, sino que desempeña un papel sorprendentemente amplio en diversos aspectos de nuestro organismo.
La vitamina D se sintetiza en la piel cuando esta se expone a la radiación ultravioleta B (UVB) del sol. Este proceso es crucial para la absorción de calcio y la formación de huesos saludables. Sin embargo, en un mundo donde las personas pasan más tiempo en interiores, la deficiencia de vitamina D se ha convertido en un problema de salud global.
5 señales de que a tu cuerpo le falta vitamina D
En Chile, la Encuesta Nacional de Salud del año 2016 fue el primer estudio poblacional en Chile que arrojó datos acerca de la vitamina D. La medición dio cuenta de que la población con algún grado de deficiencia de vitamina D en el país llega al 84%.
Otro estudio en niños de entre 4 y 14 años de edad, realizado en 2019 en Santiago, Concepción y Antofagasta, arrojó que el 70% de la población mostró deficiencia de vitamina D, a pesar de la diferente radiación solar que reciben por su ubicación geográfica.
En Estados Unidos, alrededor del 29 % de los adultos tienen deficiencia de vitamina D (tienen niveles en sangre inferiores a 20 ng/ml) y el 41 % tienen niveles insuficientes de vitamina D (menos de 30 ng/ml).
Se considera que una persona tiene un nivel de vitamina D suficiente, cuando posee 30 nanogramos por mililitro (ng/mL) en la sangre. Entre 30 a 20 (ng/mL) ya se habla de un nivel insuficiente, y bajo 20 (ng/mL) se trata de un déficit.
Si se experimentan síntomas como fatiga, debilidad muscular, dolor en los huesos, fracturas recurrentes, cambios en el estado de ánimo o debilidad inmunológica, se sugiere una posible deficiencia,
Además, si hay factores de riesgo, como vivir en lugares donde llegar poca radiación solar, o si llevan un estilo de vida sedentario sin exposición a luz solar durante el día, es importante chequear los niveles de esta vitamina.
Tener bajos estos niveles se vincula con problemas de salud, incluyendo osteoporosis, debilidad muscular y un mayor riesgo de enfermedades autoinmunes, problemas cardiovasculares, impacto en la salud mental y problemas de peso y metabolismo. La deficiencia se agrava por estilos de vida sedentarios y la falta de exposición solar segura.
Pero, ¿cómo saber que le falta vitamina D a tu cuerpo? La nutricionista dietista registrada Molly Knudsen explicó en Mind Body Green Health cinco señales se que le falta vitamina D.
1. Falta de energía
La fatiga o falta de energía es un síntoma común que puede afectar significativamente la calidad de vida de una persona. La vitamina D juega un papel importante en la función muscular y en la producción de energía en el cuerpo, por lo que niveles bajos de esta vitamina pueden contribuir a la sensación de fatiga y cansancio.
Además, “la vitamina D tiene múltiples funciones en el cuerpo y una de ellas es ayudar al centro neurálgico de las células: las mitocondrias . No tener suficiente vitamina D en su sistema puede alterar la eficiencia mitocondrial y hacer que usted, sus músculos y su cerebro se sientan deficientes”, explicó la nutricionista.
2. Sistema inmunológico débil
La vitamina D juega un papel importante en la regulación del sistema inmunológico, y la falta de esta vitamina puede afectar su funcionamiento adecuado. Un nivel bajo de vitamina D se ha asociado con un mayor riesgo de infecciones, como resfriados, gripes y otras enfermedades infecciosas.
Además, se ha observado que las personas con deficiencia de vitamina D pueden tener una respuesta inmune comprometida, lo que significa que su cuerpo puede tener dificultades para combatir las infecciones de manera efectiva.
“La vitamina D desempeña un papel enorme en la modulación de las respuestas inmunes innatas y adaptativas del cuerpo.* En otras palabras, las células inmunes necesitan D para responder eficientemente a las amenazas. Y un nivel bajo de vitamina D indica que el sistema de defensa de su cuerpo no está tan equipado como debería”, escribió Knudsen.
3. Problemas para dormir
La vitamina D puede estar involucrada en la regulación del ritmo circadiano, el ciclo natural de sueño-vigilia del cuerpo. Un desequilibrio en esta regulación puede contribuir a problemas de sueño como dificultad para conciliar el sueño o despertares nocturnos.
4. Depresión y ansiedad
La vitamina D puede influir en la producción de serotonina, un neurotransmisor que desempeña un papel importante en la regulación del sueño y el estado de ánimo. Niveles bajos de vitamina D pueden estar asociados con niveles reducidos de serotonina, lo que podría afectar negativamente el estado de ánimo.
Esto es válido para las mujeres que experimentan cambios de humor volátiles durante su ciclo menstrual, según señala al portal la fisióloga y científica en nutrición Stacy Sims, Ph.D.
5. Sentirse distraído
La falta de vitamina D no es típicamente asociada directamente con la distracción en sí misma. Sin embargo, la vitamina D juega un papel importante en la salud general del cerebro y el sistema nervioso, y los niveles bajos de esta vitamina se han relacionado con varios problemas cognitivos y neurológicos que podrían contribuir a la sensación de distracción.
¿Cómo aumentar los niveles de vitamina D en su cuerpo?
En caso de insuficiencia o deficiencia, el médico indicará el tratamiento apropiado para normalizar estos niveles. A modo de prevención, es importante que se incluya en la dieta alimentos ricos en esta vitamina, como productos lácteos fortificados con vitamina D-
Para obtener vitamina D desde los alimentos puede consumir:
- Pescados grasos, como el salmón.
- Aceites.
- Huevos.
- Paté de hígado.
- Queso.
- Leche.
- Mantequilla.
- Otros alimentos fortificados con vitamina D