¿Usted cree que hoy en Chile aún existen barreras que impiden el desarrollo de las mujeres? La respuesta a esa pregunta dependerá de si quien responde es hombres o mujer. Sí, porque en el caso de las respuestas femeninas el nivel de acuerdo con la afirmación es alto: 83,6%. En cambio, en los hombres apenas llega al 45,9%.

Los resultados corresponden a un estudio del Centro de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello (UNAB) sobre percepción del feminismo en Chile, y proporcionan una clara evidencia de que hombres y mujeres no comparten las mismas percepciones sobre las actuales barreras que se interponen a una igualdad de desarrollo entre los distintos géneros.

Un aspecto que no se trata solo de percepciones. En Chile, y en el mundo, el desarrollo, las oportunidades y nivel de violencia a la que se expone una persona todavía dependen de su género.

¿Cifras? Datos del Instituto Nacional de Estadísticas, INE, por ejemplo, muestran que los meses de la pandemia golpearon fuertemente a las mujeres, con el mayor descenso en la tasa de participación laboral, que en el trimestre móvil abril-junio de 2020 para las mujeres y mayo-julio de 2020 para los hombres, las tasas alcanzaron un 41,2% y 62,7%, respectivamente.

En Chile, y en el mundo, el desarrollo, las oportunidades y nivel de violencia a la que se expone una persona todavía dependen de su género. Foto: Agencia Uno.

Además, en el trimestre octubre-diciembre de 2020, 4 de cada 10 mujeres en edad de trabajar estaban ocupadas. Para los hombres esas cifras fueron 6 de cada 10. Y de las mujeres que no trabaja, un 33,9% declaró como principal motivo para no participar en el mercado laboral, razones familiares permanentes, es decir, tener que realizar trabajo doméstico y de cuidados no remunerados en sus hogares. Una cifra que en los hombres alcanza solo el 1,7%.

Porque en Chile las tareas de cuidado todavía se asumen como exclusivamente femeninas. Muchas madres crían solas a sus hijos o hijas. Diariamente 51 nuevas madres viven el nacimiento de una hija o hijo sin la presencia del padre, dicen cifras INE, y el 43,2% de las madres de estos niños tiene 25 años o menos.

En los hogares monoparentales, 83% de las jefaturas de hogar corresponden a mujeres, quienes perciben un ingreso per cápita 37,3% menor al de los hombres en este tipo de hogares. Y si de ingresos se trata, la proporción de mujeres sin ingresos propios es 1,6 veces más que la proporción de los hombres.

Desigualdad evidente

Cifras, datos y estudios que revelan esas desigualdades son muchos. Y que el nuevo trabajo del Centro de Políticas Públicas UNAB, muestra aún no es percibido como tal por un porcentaje importante de la población masculina. El trabajo, que se efectuó entre el 16 hasta al 22 de febrero de 2021, a través de las plataformas Facebook e Instagram, consideró a 2.693 casos.

Sandra Bravo, investigadora del Centro de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello, señala que los resultados revelan que para los hombres la percepción de las desigualdades y brechas de género es diferente a la que tienen las mujeres. “Existe una diferencia de la percepción entre hombres y mujeres. Pero no podemos decir por los resultados de la encuesta que no lo ven, no permite considerar que no ven con amplitud las inequidades que existen, simplemente da cuenta que hay una brecha entre lo que perciben los hombres y lo que perciben las mujeres”, señala.

Desde una perspectiva masculina, dice Bravo, ellos creen que se ha hecho mucho más en este tiempo con respecto a las desigualdades y brechas de género. Otra pregunta del estudio confirma ese aspecto al consultar por nivel de acuerdo con la afirmación: “La Ley chilena actual garantiza la igualdad de derechos entre hombres y mujeres”. En ese caso el porcentaje en los hombres alcanza el 48,3% y en las mujeres el 20,17%.

Desde el punto de vista de un importante grupo de hombres “se ha hecho mucho más en este tiempo con respecto a las desigualdades y brechas de género”, explica Bravo. “Valoran también mucho más los cambios legislativos, lo valoran más que las mujeres, porque creen que se han hecho grandes avances, y las mujeres que vivimos esa situación sentimos que falta mucho más”, admite la investigadora.

Desde una perspectiva masculina, un porcentaje importante cree que se ha hecho mucho más en este tiempo con respecto a las desigualdades y brechas de género. Foto: Mario Téllez

En el caso de las mujeres las limitaciones son evidentes dice Florencia Serra investigadora del Centro de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello, “pero hay una población de hombres que consideran que tenemos igualdad de condiciones, pero aún hay barreras”. Aún se prefiere contratar más a hombres que mujeres, ejemplifica la investigadora, “pese a ello, nos damos cuenta de que hay un sector de la población que piensa que reclamamos por cosas que ya tenemos, que cree que ganamos lo mismo, lo que claramente es desconocimiento, las cifras del INE lo muestran”.

Diferentes percepciones, indica el estudio, que se evidencian de forma más clara en las preguntas relacionadas con el ingreso. Por ejemplo, el 58% de los hombres no está de acuerdo con la afirmación “hoy en día, a las mujeres se les paga menos dinero por ejercer mismo trabajo que los hombres”. Un resultado relevante, dice Bravo, ya que Chile es uno de los países que presenta una mayor diferencia salarial entre hombres y mujeres según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con una brecha de 21,1%, mientras que el promedio del bloque es de 14,3%.

“Hoy día las mujeres votamos, estudiamos, trabajamos, pero la brecha se ven otras cosas, como el cuidado de los hijos, o las tareas domésticas como exclusiva responsabilidad y no deberían ser así”, señala Serra.

Existe en ese sentido en un porcentaje de la población masculina lo que Serra define como “ceguera involuntaria” que desconocer la realidad de las mujeres. La investigadora añade que por eso existen las cuotas de genero para mostrar esta desigualdad que hay que visibilizar. “Que estén equilibradas las fuerzas y participación, porque cuando no exista desigualdad por género no serán necesarias las cuotas. Ellos tienen que darse cuenta. La educación es fundamental”.

El estudio mostró además que 49% se mostró de acuerdo con la frase “las cosas estarían mejor si hubiera más mujeres en puestos de responsabilidad en el gobierno y en las empresas”, y un 56% en desacuerdo con la frase “la ley chilena actual garantiza la igualdad de derechos entre hombres y mujeres”.

Feminismo

A pesar de que la mayoría se mostró a favor en reconocer los temas de desigualdad de las mujeres, los resultados del estudio UNAB en cuanto a las movilizaciones y el feminismo en sí son interesantes. Por ejemplo, un 43% se mostró en desacuerdo con la frase “las movilizaciones feministas han generado cambios positivos para las mujeres y como consecuencia para la sociedad en general”. Cifra que, además, es mayor en los hombres, alcanzando un 56%, y un 31% en mujeres.

Ese desacuerdo con la definición de feminismo posiblemente tiene que ver, explica Bravo, con las diferencias generacionales. Para las mujeres entre 18 y 29 años existe más apertura en relación con el tema porque son ellas las que han generado cambios. “A diferencia de las que las personas mayores de 45, y a medida que avanza la edad la brecha es más alta. Por eso ese 31% conlleva una visión más conservadora y también, por ejemplo, en el caso de personas que tienen ciertas creencias políticas, de derecha se suele ser más conservadora que de izquierda”, señala.

En el caso de quienes se reconocen de una tendencia política de derecha el desacuerdo con la afirmación fue 73%, lo que llega a 19% en quienes se reconocen de izquierda.