China volvió a sorprender al mundo científico ayer al anunciar que comenzaría a vacunar a niños desde los tres años, hasta ahora los más pequeños del planeta en ser inoculados contra el virus Sars-CoV-2, causante de la actual pandemia de Covid-19 que en un año y medio ya ha cobrado la vida de 3,7 millones de personas y ha enfermado al menos a otros 174 millones, según el centro de recursos de la Universidad Johns Hopkins.
Detrás de este anuncion está el laboratorio Sinovac, el mismo que produce las vacunas con las que se ha vacunado a más del 90% de la población en Chile y que también serán probadas en niños de nuestro país como parte de un ensayo clínico que ya preparan investigadores de la Universidad Católica.
Sin adelantar fecha, un portavoz del laboratorio Sinovac, indicó a la AFP que su inmunizante CoronaVac podría distribuirse a los menores, esto tras conocerse los resultados del ensayo clínico que realizaron en niños y adolescentes. El viernes de la semana pasada, Yin Weidong, director ejecutivo de esta farmacéutica había adelantado a la emisora estatal CCTV que el estudio clínico en menores que se inició a principios de año ya fueron completados en su primera y segunda fase. ¿Los resultados? “Cientos de casos mostraron que después de la vacunación, el grupo (de tres a 17 años) es tan seguro como el grupo de adultos de 18 años”.
Estudio en Chile
Hace justo un mes, el rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Ignacio Sánchez, anunció que pretendían en julio iniciar el estudio clínico más grande realizado en la población pediátrica: cinco mil menores chilenos, entre los 3 y los 17 años. ¿El valor? “El costo de realizar el estudio en niños se estima en cerca de 12 millones de dólares, debido a que son 5 mil voluntarios de distintas edades y rangos etarios lo que tiene un costo mayor. Es aproximandamente el doble de lo que costó el estudio en adultos”, indicó en esa oportunidad.
Hoy ya existen algunos avances. Alexis Kalergis, académico de la Universidad Católica, director del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII) y director del ensayo clínico realizado en adultos, explica que “actualmente se está trabajando en el diseño de este estudio clínico y dependiendo de su estructura se definirá el número de niñas y niños que podrán participar, así como los centros/ciudades participantes”. Terminado el diseño, se presenta a las comisiones éticas respectivas y al Instituto de Salud Pública para su aprobación y cuando estén listas, se inician formalmente las actividades asociadas al inicio del estudio, la comunicación a la comunidad de las características de éste y de los participantes, junto con el mecanismo de inscripción y participación.
Pablo González, investigador de la Universidad Católica y del IMII del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia (IMII) y director ejecutivo del estudio clínico, adelanta que en los estudios fase 1 y 2 realizados en niños entre 3 y 17 años por Sinovac en China “se evaluó la seguridad e inmunogenicidad de la vacuna en un esquema de dos dosis de vacunación separadas por 4 semanas”. Esto es, el mismo esquema de vacunación que hoy se utiliza en Chile para la población adulta que se inocula con esta vacuna.
“Los estudios de eficacia (fase 3) se construyen sobre estudios clínicos previos (fases 1 y 2) y por tanto mantienen condiciones similares a las etapas previas, lo que resguarda su seguridad y permite una evaluación global de las características de vacuna en la población estudiada”, dice González. En esa lógica, lo más probable es que los niños que participen del estudio clínico chileno prueben el mismo esquema de vacunación: la segunda dosis, cuatro semanas después de la primera.
En cuanto a la dosificación, aunque todavía no se publican los resultados del estudio chino, se sabe que en este se utilizó la misma dosis que para los adultos, por lo tanto, el estudio clínico fase 3 también debiera seguir igual.
Importancia de vacunar a los niños
Esta semana, en el Reino Unido, Adam Finn, académico de la Universidad de Bristol, decía que si se vacunaba suficientemente a los adultos, no era necesario vacunar a los niños. Al menos en su país.
Ante esta declaración Susan Bueno, académica de la UC, investigadora del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII) y directora científica del ensayo, recuerda que un estudio reciente en Brasil, en la ciudad de Serrana indica que inmunizando al 75% de la población adulta se logra una disminución muy importante de casos Covid-19, logrando una inmunidad de tipo comunitaria significativa.
“Si bien este resultado sugiere que no sería necesario vacunar a la población pediátrica, hay que recordar que los niños son susceptibles a la infección y también pueden sufrir Covid-19 grave. Además, a medida que los distintos grupos estén inmunizados, el virus seguirá infectando a aquellos que no son inmunes, con la posibilidad además de que se generen adaptaciones en el virus que le permitan transmitirse más eficientemente o causar enfermedad más severa en aquellos grupos”, dice Bueno. Según la investigadora, este fenómeno ya se está observando en Chile, especialmente en niños y niñas con comorbilidades.
La investigadora del IMII agrega que todavía hay muchos países en los que la tasa de vacunación de la población adulta “es sumamente baja y posiblemente se requiera de mucho tiempo para que a nivel mundial se logre vacunar a toda la población adulta”. Por lo tanto, en esos casos, “es relevante generar evidencia científica y clínica sobre la eficacia de estas vacunas en la población pediátrica, para que puedan estar disponibles para este grupo poblacional de gran tamaño, sobretodo considerando que en esta población existen personas con un alto riesgo de desarrollar enfermedad severa, debido a co-morbilidades”.
La doctora María Luz Endeiza, infectóloga y jefa del Vacunatorio de Clínica Universidad de los Andes, fue alumna de Finn en un curso de actualización. Respecto de su planteamiento, señala que en parte sí está de acuerdo con él. “El doctor Finn trabaja mucho con inmunidad de rebaño. Si es una población que está muy bien protegida a nivel de adultos con sus vacunas, podría ser que no se necesitar vacuna para los niños, pero lo que estamos viendo en Chile es que protegidos los mayores, los contagios y casos graves están bajando en edad”, indica.
“El virus busca susceptibles y si no encuentra en los adultos vacunados, busca en los menores que no están vacunados”, agrega.
Menores de 17 años
Actualmente, en Chile existe autorización para el uso excepcional de la vacuna Pfizer en los menores desde los 12 y hasta los 16 años (en la aprobación otorgada en diciembre del año pasado por el ISP se incluyo a los menores desde los 16 y adultos).
De acuerdo a lo informado por el Ministro de Salud, Enrique París, la población menor de edad comenzará a ser inoculada cuando el actual calendario de vacunación llegue hasta los 18 años. Mañana, comenzará la vacunación para los jóvenes de 22 años y continuará la inoculación para los rezagados. En los cálculos de la autoridad, la vacunación en los menores de 18 años comenzará después del 20 o 21 de junio, se realizará con la vacuna Pfizer que es la aprobada para este tramo de edad y se priorizará sobre todo a aquellos que tengan enfermedades crónicas o comorbilidades.
Recién esta semana, el Consejo Asesor de Vacuna e Inmunización (Cavei) del Ministerio de Salud, se reunirá para definier su recomendación de vacunación en menores de 18 años. Hasta ahora, los únicos menores que sí han recibido vacuna son los adolescentes entre los 16 y 17 años que son trasplantados o dializados.
La experiencia hasta ahora muestra que los niños que contagian con el virus Sars-CoV-2, suelen hacer cuadros más leves que los adultos, pero en algunas oportunidades reaccionan con altos niveles de inflamación al contagio desarrolland el Síndrome Inflamatorio Multisistémico Pediátrico más conocido como PIMS, por sus siglas en inglés. El año pasado se registraron 186 casos de PIMS (partieron en junio), hoy en lo que va de este año, ya suman 117.
Sin embargo, sobre todo este año, también se han visto más casos de Covid grave en las UCI de los recintos hospitalatarios a lo largo del país.
Covid grave en niños
Desde el año pasado, cuando comenzaron a ver casos de PIMS, los infectólogos pediátricos armaron una red de información para dar cuenta de cómo estaba afectando esta enfermedad a los menores.
La doctora Endeiza, dice hoy hay más PIMS que el año pasado porque hay más casos, pero lo que les ha llamado la atención es la gran cantidad de niños hospitalizador debido a neumonía por Covid y de ellos, que un gran número son obesos.
En el reporte que realizan semana a semana, muestra que en la semana pasada (al 6 de junio) registraron 25 casos de menores con neumonía Covid-19 severos que han debido ingresar a cuidado intermedio o intensivo en alguno de los 34 centros que son parte de esta red de Arica a Punta Arenas. Más que ninguna otra semana. La anterior (30 de mayo), fueron 12, todos obesos. “Algunos niños de 12 años que pesan 64 kilos o de 14 que pesan 90″, indica la especialista.
En total, desde el 18 de abril hasta el 6 de junio, 84 menores han sido hospitalizados.
Para los niños y adolescentes que tienen obesidad, la vacuna es importante. A ellos se debería vacunar primero dice Endeiza si se cuenta con la vacuna Pfizer.
Respecto de la inoculación con Sinovac, la infectóloga dice que a la población menor se debe inyectar vacunas que ya fueron probadas en ese tramo de edad y mostraron resultados positivos. “Sinovac en China está recién en la fase 2. No se ha hecho fase 3. Mientras no estén listos todos los estudios y en un gran grupo de la población no se puede hacer lo que se hizo allá y vacunar a menores desde los tres años sin terminar los ensayos y mostrar los resultados”.
Bueno recalca que es importante que todas las personas adultas que tienen la oportunidad de vacunarse y aún no lo han hecho, lo hagan. “Los datos científicos y clínicos han demostrado que la vacunación es un mecanismo efectivo para prevenir hospitalización y muerte por Covid-19, sobre todo necesario en este momento de alta circulación del virus. Mientras antes haya un alto porcentaje de la población vacunada, más factible será que comience a reducirse la circulación de Sars-CoV-2 en la población”, indica.