Astrónomos de la Universidad de Monash han publicado nuevas imágenes en el infrarrojo cercano del sistema HD 169142, que permiten confirmar la formación de un protoplaneta en este sistema estelar.
El equipo de investigación utilizó datos del Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Chile de una estrella a más de 350 años luz de distancia rodeada por un disco protoplanetario.
“Esperamos que los planetas estén calientes durante su formación, y el telescopio observó HD 169142 en el infrarrojo cercano para buscar firmas de formación de planetas alrededor de la estrella”, dijo en un comunicado el autor principal del estudio y doctorando Iain Hammond de la Escuela de Física y Astronomía de la Universidad de Monash.
Las imágenes capturadas con el instrumento SPHERE en el VLT revelan una fuente compacta que se mueve durante cuatro años (2015-2019). “Detectamos con éxito un protoplaneta a aproximadamente 37 au (un poco más lejos que la órbita de Neptuno) de la estrella en las cuatro observaciones, y orbita su estrella anfitriona a la velocidad esperada definida por la tercera ley de Kepler”.
“Esto representa una confirmación de las observaciones anteriores publicadas por Gratton et al. (2019) que afirmaban una detección tentativa de un protoplaneta”. El nuevo estudio confirma esta hipótesis tanto a través de un nuevo análisis de los datos utilizados en su trabajo como de la inclusión de nuevas observaciones de mejor calidad.
Es el tercer planeta en formación confimado
Solo se han fotografiado otros dos exoplanetas durante la formación: PDS 70 b y c, que orbitan la estrella PDS 70. Este último descubrimiento de HD 169142 b eleva ese número a tres.
Los investigadores también encontraron que el planeta había tallado un espacio en el disco (la estructura en forma de anillo) a medida que atraía material del propio disco.
“En el infrarrojo cercano podemos ver un brazo espiral excitado en el disco por el planeta, lo que sugiere fuertemente que otros discos protoplanetarios que contienen espirales similares podrían albergar planetas aún no descubiertos”, dijo Iain.
El espectro sugiere que una gran cantidad de polvo rodea el planeta, lo que refleja la luz estelar. Esto es de esperar si el planeta está enterrado en una cantidad significativa de polvo que se ha acumulado desde el disco.
“Este planeta también es un objetivo emocionante para el telescopio espacial James Webb recientemente desplegado”. La alta sensibilidad de JWST permitirá a los investigadores detectar el polvo caliente que rodea al planeta.
Se espera que el material tome la forma de un disco circunplanetario (un disco alrededor del propio planeta) que podría formar pequeños satélites como lunas. Esta nueva detección ha demostrado que es posible obtener imágenes directamente de estos planetas en formación incluso cuando aún están completamente enterrados en el polvo.
El nuevo estudio se publica en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society (MNRAS).