¿Ayuno intermitente o contar calorías? Esta es la mejor forma de perder peso según la ciencia
Las dietas de ayuno están de moda, pero al momento de perder peso es importante saber qué dice la ciencia sobre esto y qué sirve más: ¿Ayuno intermitente o contar calorías?
Es muy probable que en los últimos meses haya escuchado más de una vez el término “ayuno intermitente”. Cada vez más artistas, deportistas, influencer y rostros conocidos, cuentan del éxito que han obtenido con este modelo de alimentación.
Se trata de un patrón de alimentación que alterna entre períodos de ayuno y períodos de alimentación. Ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus posibles beneficios para la salud, que incluyen la pérdida de peso, la mejora de la salud metabólica, la reducción del riesgo de enfermedades crónicas y la promoción de la longevidad. Sin embargo, una nueva investigación señala que esto podría no ser del todo cierto.
¿Ayuno intermitente o contar calorías? Esta es la mejor forma de perder peso según la ciencia
Un ensayo aleatorio realizado por la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, comparó a adultos con obesidad y prediabetes que comieron la misma cantidad de calorías diarias, pero un grupo siguió un horario de ayuno y el otro comió en cualquier horario libremente.
Los resultados publicados en la revista Annals of Internal Medicine, mostraron que no hubo diferencias de pérdida de peso entre las personas que realizaron ayuno y las que tenían un patrón de alimentación habitual, cuando los investigadores controlaban la cantidad de calorías que consumían. Lo que sugiere que las calorías totales pueden ser más importantes que el horario de las comidas cuando se trata de perder peso.
“Esto nos hace pensar que las personas que se benefician de comer con un tiempo restringido -es decir, que pierden peso- probablemente se debe a que comen menos calorías porque su ventana de tiempo es más corta y no a otra cosa”, dijo la autora principal del estudio, Dra. Nisa Maruthur, profesora asociado de medicina en la Universidad Johns Hopkins.
Esto puede explicarse debido a que el ayuno intermitente, o la alimentación con restricción de tiempo (TRE), es un enfoque dietético en el que las personas limitan su alimentación a un período de tiempo durante el día y luego ayunan durante las horas restantes.
La evidencia muestra que cuando los adultos con obesidad limitan su período de alimentación de 4 a 10 horas, naturalmente reducen la ingesta calórica en aproximadamente 200 a 550 calorías por día y pierden peso en 2 a 12 meses, explica el comunicado.
Es por esto que, los investigadores quisieron ver qué pasaba cuando limitaban su período de alimentación, pero sin reducir las calorías diarias. Asignaron al azar a 41 adultos con obesidad y prediabetes a TRE con un período de alimentación de 10 horas o un patrón de alimentación regular durante 12 semanas (aproximadamente 3 meses) para comparar la pérdida de peso y otras medidas de salud metabólica. En su mayoría eran mujeres negras con una edad promedio de 59 años.
Al comienzo del estudio, los investigadores evaluaron el historial y el nivel de actividad de los participantes para estimar las necesidades calóricas iniciales, y los participantes comieron la misma cantidad de calorías diariamente durante todo el estudio.
La mitad del grupo comió durante un período de 10 horas, de 8 am a 6 pm. Y consumieron la mayor parte de sus calorías antes de las 1 pm, porque algunas investigaciones han sugerido que comer la mayoría de las calorías temprano en el día podría ser beneficioso para pérdida de peso.
La otra mitad sin restricción, comía desde las 8 am hasta la medianoche y consumía la mayor parte de sus calorías diarias después de las 5 pm, un horario destinado a imitar los patrones alimentarios de muchas personas fuera de un entorno de investigación.
Después de 12 semanas, ambos grupos perdieron aproximadamente la misma cantidad de peso y no hubo diferencias reales en la glucosa en ayunas, la circunferencia de la cintura, la presión arterial o los niveles de lípidos.
“Consumir la mayoría de las calorías más temprano en el día durante una alimentación restringida de 10 horas no disminuyó el peso más que consumirlas más tarde en el día”, escribió un equipo dirigido por Maruthur.
Según los autores, estos hallazgos sugieren que si las intervenciones de TRE inducen la pérdida de peso, es probable que se deba en parte a una reducción de calorías y, por lo tanto, los médicos pueden aconsejar a los pacientes que la TRE puede ayudarles a perder peso al disminuir su ingesta calórica.
De todas formas, el ayuno intermitente podría ser un enfoque simplificado para tratar la obesidad ya que podría ayudar a los pacientes a quienes no les va bien contando calorías a reducir su ingesta según los horarios, explicaron las Dras. Krista Varady y Vanessa Oddo , investigadoras de nutrición de la Universidad de Illinois que escribieron un editorial que acompaña al nuevo estudio.
“La creciente popularidad de la alimentación con restricción de tiempo se debe probablemente a su pura simplicidad: no requiere que una persona cuente calorías para perder peso”, señalaron.
El estudio muestra que una dieta de ayuno es “efectiva para perder peso, simplemente porque ayuda a las personas a comer menos”, dijeron, por lo que si le resulta complicado realizar un seguimiento constante de sus calorías todos los días, una dieta de ayuno aún podría ser adecuada para usted, ya que el ayuno reduce naturalmente las calorías a niveles que pueden desencadenar la pérdida de peso, razonaron Varady y Oddo.
El ensayo tiene limitaciones como que es relativamente pequeño, agravado por una población no ampliamente representativa (93% mujeres, 93% negros). El Dr. Jacopo Scotucci, investigador asociado y consultor endocrino honorario de la Universidad de Cambridge y el Hospital Universitario de Cambridge, dijo a Science Media Centre: “No creo que este estudio por sí solo tenga implicaciones significativas en el mundo real, por las razones señaladas anteriormente”.
“Además, dado que ya sabemos que comer con un horario restringido puede ser una opción viable y efectiva para algunos pacientes, independientemente del mecanismo de acción subyacente (por ejemplo, según sus circunstancias de vida y trabajo, simplicidad, facilidad de ejecución, menor costo que otras dietas, etc.), no veo que esta información altere significativamente la práctica clínica”, agregó.
La profesora Nita Forouhi, Unidad de Epidemiología del MRC de la Universidad de Cambridge, dijo al mismo medio: “Como afirman los autores y el editorial, TRE puede ser una estrategia útil porque puede ayudar a perder peso sin necesidad de contar calorías, lo cual no es un ejercicio fácil”.
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