Un matrimonio civil. Algo íntimo con 50 invitados entre familiares y amigos. Eso era lo que Pedro Vera (45 años) y Paz Inostroza (39 años), planeaban sobre su ceremonia. Sin embargo, llegó la pandemia y con ella las restricciones a la vida como la conocíamos. Hubo que modificar lo planificado.

Cuando decidieron casarse, a inicios de 2020, pidieron hora en el Registro Civil para el mes de agosto. “La fecha que teníamos no se concretó por pandemia, porque si estabas en Fase 1 se perdía la hora y había que pedir otra, eso nos retrasó mucho”, comenta Pedro.

Finalmente, en enero de 2021 lograron tener una hora para el 9 de julio, que luego adelantaron para el 29 de junio. La ceremonia y celebración proyectada se transformó en un desayuno. “Lo que nos permitía el aforo, cinco invitados, nosotros con Paz y nuestra hija Rosario, fuimos ocho, más una persona que nos sirvió el desayuno en la nuestra casa”, dice Pedro.

Pedro reconoce quen antes habíamos pensado que al casarse lo harían con cerca de 50 personas como invitados: “Habíamos cotizado un lugar. Habíamos pensado en algo por el civil, tranquilo entre ella y yo, más nuestras familias, que son pequeñas y con los amigos más íntimos, una cena, cóctel y una fiesta. Ahora salió mucho más barato, fue ahorrarse harta plata”,

El matrimonio de Pedro y Paz es parte de una demanda creciente de bodas que se aprecia en Chile. De un boom luego de que en 2020 y la llegada de la pandemia, muchas parejas que no tuvieron otra alternativa que posponer su boda. Las restricciones de desplazamientos y las condiciones sanitarias lo obligaban.

En 2020, según una encuesta de matrimonios.cl, nueve de cada 10 parejas en Chile decidieron posponer su boda. En sondeo estableció además que los matrimonios se aplazaron en promedio unos seis meses.

“Durante los primeros meses de pandemia, 8 de cada 10 novios nos pidieron cambio de fecha” señala al respecto la gerente de Comunicaciones y Sustentabilidad de Falabella Retail, Laura Viegas.

Matrimonios en pausa

Existe una demanda reprimida. En Chile en los últimos años los matrimonios en promedio bordeaban los 60 mil al año. En 2019 se llevaron a cabo 61.596. Eso cambió en 2020, cuando se registró una fuerte caída a solo 39.477 enlaces, según datos del Registro Civil.

Pero este año, principalmente desde el segundo semestre el mercado de matrimonios se reactivó. Datos del Registro Civil entregados a Qué Pasa indican que a la fecha ya se han efectuado 23.908 matrimonios. A su vez, el total de reservas de horas al 12 de agosto y hasta diciembre de 2021, ya va en 20.063. Es decir, si se compara el total 2020 con los matrimonios realizados a la fecha, más los programados, es probable que en 2021 se experimente un alza del 11,38% (4.294).

El retraso en las bodas y su posterior auge en 2021, no es exclusivo de Chile. En Estados Unidos después de una fuerte caída en 2020, especialistas de la firma The Wedding Report, señalan que se espera que el número en 2021 de 2,77 millones, más del doble de lo de 2020, un alza del 30% con respecto a 2019.

En Chile este fenómeno se impulsó gracias al desconfinamiento. En el Servicio de Registro Civil e Identificación reconocieron a Qué Pasa que esperan una mayor demanda de solicitudes de hora de matrimonios y que han puesto a disposición más de 40 mil citas para los próximos 12 meses, las que están disponibles en www.registrocivil en el caso de 43 oficinas de la Región Metropolitana. Para otras oficinas, las personas se deben dirigir a las dependencias de la comuna donde desea realizar el matrimonio.

En Chile en los últimos años los matrimonios en promedio bordeaban los 60 mil al año. En 2019 se llevaron a cabo 61.596. Eso cambió en 2020, cuando se registró una fuerte caída a solo 39.477 enlaces, según datos del Registro Civil.

El alza ya es evidente. Un incremento importante en eventos y reservas en el último trimestre, y muy especialmente para 2022, reconoce Mauricio Meyer, gerente general de Hotel NODO. “Es común que muchas personas quieran retomar su ceremonia luego de tenerla detenida por casi dos años”, indica sobre cómo la cantidad de reservas ha aumentado exponencialmente estos meses.

El wedding planner Felipe Molina, con 12 años de experiencia en el rubro, también aprecia esa reactivación. “Desde que tuvimos cambio de fase se reactivaron sobre un 100%”, admite Molina quien lleva tres fines de semana con tres matrimonios y con eventos incluso en la semana. “Agosto es locura, en actualidad estoy casando varias parejas que se van al extranjero, estamos casando a todos esos clientes que han postergado cuatro a cinco veces”.

Para el fotógrafo profesional que realiza eventos como bodas, Felipe Quintana fue evidente cómo con el inicio de la pandemia los eventos agendados fueron suspendiendo y cómo eso ahora cambió. “En este último tiempo desde que entramos en Fase 2, comenzaron a solicitar mucha más información”, indica.

La pandemia vino a golpear un sector ya afectado. Habían muchos eventos pendientes desde el estallido social. “Veníamos en una suerte de limbo desde el estallido social que nos pegó fuerte”, explica Molina que añade que muchos matrimonios en 2019 programados en pleno centro de Santiago, como en la iglesia San Francisco, por ejemplo, una zona muy afectada, se cancelaron. “Se destruyeron todas esas iglesias que decorábamos y los centros de eventos de esa zona fueron súper golpeados, nadie quiere ir a casarse al centro”.

Los cambios en el plan Paso a Paso fueron los que en gran medida impulsaron la nueva reactivación. “Nosotros estábamos parados sin eventos. Era algo que esperábamos, pero no sabíamos en qué momento iba a llegar. Independiente de la vacunación, había mucha incertidumbre, dependíamos del plan Paso a Paso que ahora último ha tenido cambios a favor de nosotros”, dice Molina.

La presidenta de la Asociación de Banqueteros y Centros de Eventos, Sofia Jottar, califica el aumento como “muy sustantivo”. La demanda, dice ha aumentado al doble “y me atrevería a decir que en algunos casos al triple, si se compara con la época de restricción, si bien no hay certeza absoluta, ahora con el 80% de la población vacunada es mejor que cuando no estaba vacunada”.

“Hay una demanda súper insatisfecha porque la gente no quiere celebrar on line. No te casas por zoom”, apunta Jottar.

En el retail vinculado a estas celebraciones también lo notan. Este año y, sobre todo el segundo semestre, indican en Falabella Novios, se aprecia un alza en las inscripciones respecto del mismo periodo de 2020. “En julio aumentamos un 143% las inscripciones en comparación con 2020 y en lo que va de 2021 ya superamos en más de un 4% lo registrado el año pasado”, destaca la gerente de Comunicaciones y Sustentabilidad de Falabella Retail, Laura Viegas.

En 2020, según una encuesta de matrimonios.cl, nueve de cada 10 parejas en Chile decidieron posponer su boda.

Desde abril ya notan en Falabella Novios ese crecimiento en las inscripciones en comparación con el mismo periodo del año anterior. “Junio, julio y agosto han sido meses más fuertes en los que hemos crecido más del 100% respecto de 2020. Esperamos que esta tendencia se mantenga en aumento a medida que el plan paso a paso siga avanzando y se acerque también la temporada primavera-verano”, reconoce Viegas.

Pilar Jadue, fotógrafa profesional de bodas también es testigo de cómo el último mes el tema revivió: “Están llegando cotizaciones para octubre, noviembre, diciembre y hasta febrero de 2022”.

Muchas parejas están siendo cautelosas, agrega Jadue, están planificando para final del verano y no más allá, “porque todavía hay un poco de inseguridad, es una inversión tan grande casarse que están pensando más en lo inmediato”. Si antes se reservaba con un año de anticipación, ahora las reservas son con tres o dos meses, “hasta me han cotizado dos semanas antes, ahora todo es como bien encima”.

Celebrar en pandemia

Pero el Covid-19 no solo cambió el número de matrimonios, también transformó el modo en qué se piensa, organiza y realizan esos eventos. Hoy el camabio es a celebraciones más pequeñas e íntimas, diseñadas para espacios abiertos, coinciden los especialistas en el área.

El sector se tuvo que adaptar y ofrecer espacios seguros. “En este momento tenemos las dos ´V´, que son la vacunación y ventilación, como garantes de que el nivel de contagio se mantendrá bajo”, aclara la presidenta de la Asociación de Banqueteros y Centros de Eventos. También hoy el conocimiento de cómo se transmite el virus, principalmente por el aire, ayuda, añade a “evitar esos riesgos y celebrar con seguridad”.

Se pueden realizar matrimonios. Pero aún estamos en pandemia. Por eso, reconoce Jottar las restricciones aún son “muy duras” para el sector. Entre otros aspectos, se estable, por ejemplo en Fase 3, un mínimo de ocho metros cuadrados con persona, “ya sea una fiesta o un coctel móvil”, indica. En cuanto al máximo de asistentes para lugares cerrados son 100 personas y en espacios abiertos 200, “y todos los asistentes con pase de movilidad”, agrega.

Lo que más se hacen son ceremonias civiles cortas, en su mayoría en la mañana y luego una pequeña reunión en centro de eventos o en casa, señala Quintana: “Todo es mucho más corto, sin fiesta. Son ceremonias más breves, de unos 20 minutos y luego se realiza una sesión de fotografías en otro espacio, para que tengan más variedad de fotos”.

Con respecto a los aforos permitidos en matrimonios civiles, desde Registro Civil indican que actualmente la gran mayoría de las oficinas pueden celebrar matrimonios con los contrayentes y los dos testigos, “esto debido a las dimensiones de las salas de ceremonia de las oficinas y las restricciones vigentes (plan Paso a Paso)”.

“Se recomienda planificar con tiempo y ser flexibles a la hora de escoger una oficina, ya que si no encuentra en la dependencia de su comuna de residencia puede optar por cualquier otra, para ellos contamos como una red de atención en todo Chile” resaltan desde Registro Civil.

Pero el Covid-19 no solo cambió el número de matrimonios, también transformó el modo en qué se piensa, organiza y realizan esos eventos. Ahora son celebraciones más pequeñas e íntimas, diseñadas para espacios abiertos, coinciden los especialistas en el área.

La pandemia les enseñó muchas cosas, dice el gerente general de Hotel NODO, como adaptarse a los cambios, flexibilizar los horarios y disminuir la cantidad de invitados. “Producto del toque de queda hemos visto que los matrimonios se realizan principalmente de día, con almuerzo y terminan en la tarde/noche”, explica sobre una restricción horaria que les ha permitido innovar con una variante de celebración, “con la opción de quedarse a dormir en este primer edificio que purifica el aire en Latinoamérica, incluso cuando los novios y sus invitados duermen”.

Si bien hay incertidumbre por la variante Delta, “de todas maneras la gente está planificando matrimonios” agrega Jottar. Las medidas de cuidado, aparte del aforo y metros cuadrados, incluyen verificar el pase de movilidad y la medición de CO2 en los salones.

Matrimonios con protocolos diferentes. Y con decoración diferente también. “Cambio la decoración, cambiaron los montajes de matrimonios por protocolos Covid”, explica Molina. Ya no se pueden hacer buffet de postres, todo ahora hay que llevarlo a la mesa.

Ahora con este nuevo auge se ha tenido que considerar además el alto precios de las flores. Como alternativa, dice Molina los novios optan por decoración y conceptos más orgánicos, mucha vegetación, brotes y ramas. “En ese aspecto la pandemia nos afectó, el precio de las flores subió mucho, subió en un 100%, están carísimas”.

Son matrimonios más sencillos. “Los novios se adecuan porque quieren gastar menos, al ser más chicos, no es el mismo presupuesto de antes”, asegura Molina. Si normalmente en época pre pandemia muchos novios no escatimaban en gastos, ahora al ser máximo de 200 personas “el nivel de producción bajó en 70%”.

“También piden espacios al aire libre y políticas blandas de anulación, como por ejemplo no cobrar penalidades al retroceder de fase”, añade el gerente general de Hotel NODO.

Muchos novios decidieron casarse en pandemia con menos gente, “pero con la ilusión de que cuando ya no haya pandemia poder hacer una fiesta grande”, comenta Jadue sobre lo que una gran mayoría de clientes le dice. “Matrimonios pequeños, aunque son más sencillos pueden ser igual de lindos. Mucha banqueteria y wedding planners se han adecuado como al aforo nuevo de para que no pierdan esto glamoroso que tiene casarse, se puede hacer sin perder lo lindo del momento y que sea especial”.