Según el informe Climatescope 2018, confeccionado por BloombergNEF, Chile es el líder mundial en el uso e inversión de Energías Renovables No Convencionales (ERNC). El país trepó de la séptima posición que ostentaba en 2017, al primer lugar en esta última versión. El reporte destacó a Chile por la implementación de políticas e inversión para dejar de lado el carbón, sumado a su compromiso por adquirir energías limpias, como la solar, en el corto, mediano y largo plazo.  Esta ya representa un 10% de la matriz energética total de la nación.

El documento de 66 páginas, analizó en profundidad el comportamiento de 103 países alrededor del orbe. Además de Chile, destacó a India y Jordania, con el segundo y tercer lugar del ránking, respectivamente. Más atrás se ubicó China (7°) y México (8°)Climatescope asigna puntaje a cada país según su idoneidad con respecto a la inversión y extensión de energías limpias.

¿Cómo Chile pasó de tener una matriz energética sustentada en el carbón, a ser líder mundial en el uso de energías renovables?

Según Carlos Finat, director ejecutivo de la Asociación Chilena de Energías Renovables (ACERA), Chile cuenta con un marco legal que ha ido eliminando paulatinamente las barreras que existían hace algunos años y que, en la práctica, impedían la participación de las ERNC en el mercado eléctrico, principalmente por imponerles un riesgo muy alto en relación a sus contrapartes convencionales. "El liderazgo de Chile se funda en los excelentes y abundantes recursos ERNC con que cuenta (el potencial de proyectos ERNC identificados actualmente podrían suministrar unas 80 veces la actual demanda eléctrica del país) y en la estabilidad política, económica y social que tiene nuestro país, que es reconocida muy favorablemente por los inversionistas interesados en el sector de energía", dice. Ello ha permitido que Chile sea reconocido mundialmente porque "las ERNC han alcanzado una penetración cercana al 20%, sin subsidios y compitiendo contra las energías tradicionales".

Cristián Muñoz, académico de la Universidad Católica y fundador del portal Breves de Energía, señala que el buen funcionamiento del mercado de electricidad en nuestro país y la baja sustancial que han experimentado los precios internacionales de las centrales eólicas y solares fotovoltaicas, han permitido que las empresas generadoras hayan sido exitosas en la incorporación masiva al sistema eléctrico de este tipo de tecnologías. "A modo de ejemplo, hace tan sólo algunos años atrás una central solar fotovoltaica costaba alrededor de US$ 5.000 por cada kW instalado, mientras que hoy cuesta cerca de US$ 1.000. Además, las turbinas eólicas presentan importantes ganancias de eficiencia, que les permite reducir su costo de suministro".

Mariana Brüning, docente de la Universidad de Chile e ingeniera de proyectos de Cyclo Sustainability, establece que hasta hace unos años las licitaciones de energía eran por 24 horas; esto hacía muy complicado y costoso para los productores solares o eólicos poder generar energía en la noche, "entonces se decidió cambiar las licitaciones de los suministros y hacerlos por tramo o bloques horarios, para darle espacio competitivo a las ERNC. Esto se suma al potencial de producción solar y eólico en el norte de nuestro país; ambos aspectos han dado espacio para un crecimiento acelerado para este tipo de energías, y se espera que esta tendencia continúe".

Jorge Leal, country manager de PV Power Chile, responsable de generar 9 MW distribuidos en las tres plantas solares fotovoltaicas en el país, añade que Chile supo identificar a tiempo las ventajas de la energía solar, "recurso que poseemos en abundancia sobre todo en el norte del país, y logró implementar una modificación de los reglamentos de las licitaciones eléctricas de las empresas distribuidoras. Esto abrió la puerta al desarrollo y financiamiento de grandes parques solares 'utility scale', y en conjunto con la ley de generación distribuida, nos han convertido en lideres a nivel mundial".