En una de las escasas fuentes de agua en el árido desierto de Atacama, un grupo de investigadores encontró una especie de rana que se creía desaparecida desde hace más de 80 años.
La rana de Hall, debido al hallazgo del geólogo y zoólogo estadounidense Frank Gregory Hall en 1935, fue reencontrada en una expedición a Aguas Calientes, cerca de la localidad de Ollagüe, lugar donde afloran aguas termales que rondan los 28 °C.
“Pedimos información al museo, donde está registrado el tipo de Hall (...). Nos mandaron fotografías de las larvas, fotografías del tipo (de rana), las comparaciones, los dibujos”, relató César Cuevas, académico del Departamento de Ciencias Biológicas y Químicas de la U. Católica de Temuco.
El trabajo se publicó en la revista científica Zootaxa este año, agregó el autor principal del estudio sobre el anfibio.
Los expertos todavía deben hacer nuevos estudios para determinar la interrelación de la especie con su hábitat.
Cuevas advirtió que el problema de agua en el desértico norte del país por la extracción de firmas mineras y otras actividades pone en riesgo la conservación de ésta y otras especies, como la rana del Loa.
“Estos animales son estrictamente acuáticos, no tienen otra posibilidad, cinco minutos fuera del agua y se mueren, se deshidratan. Así que yo creo que esa es una medida importante, salvaguardar este lugar que es único”, urgió el experto.