El estado de Indiana anunció este viernes la primera muerte vinculada con el uso de cigarrillos electrónicos. Con este fallecimiento ya son tres las víctimas fatales en Estados Unidos que se relacionan con la práctica del vapeo de tabaco. Los otros dos también ocurrieron esta semana en los estados de Oregón e Illinois.

Otros 450 pacientes han llegado hasta los centros asistenciales acusando dificultades respiratorias graves relacionadas con el vapeo.

"La trágica pérdida de un paciente y el número creciente de lesiones relacionadas con el vapeo son advertencias que no podemos ignorar", señaló en un comunicado hoy la comisionada de Salud de Indiana, Kristine Box. "Sabemos que estos productos, típicamente, contienen nicotina, la cual es altamente adictiva".

Esta tercera muerte, coincide con la publicación de un artículo en la revista New England Journal of Medicine en el que un grupo de investigadores de la Universidad de Salud en Utah identificó una característica hasta ahora desconocida de la enfermedad respiratoria vinculada con el vapeo: neumonía grve que no es provocada ni por virus ni bacterias.

De acuerdo al estudio, en los últimos meses ha aparecido en varias partes del país  pacientes que son usuarios de cigarrillos electrónicos que sufren un tipo de enfermedad respiratoria que causa que en sus pulmones aparezcan células de inmunidad con pequeñas gotas aceitosas llamadas macrófagos cargados de lípidos.

Los macrófagos se acumulan en los sitios de infección y "son células que se distinguen muy bien y que no vemos a menudo", dijo el autor principal del estudio Scott Aberegg. "Y eso hizo que nos preguntáramos si están allí eliminando desechos introducidos en los pulmones por el vapeo".

Aunque reconoce que es "demasiado pronto para estar seguros", Aberegg explicó que estos macrófagos pueden resultar útiles para confirmar o descartar esta enfermedad y pueden ayuda a "entender qué causa esta enfermedad".

Los escáneres de pulmones de pacientes con enfermedad de vapeo muestran lo que parece una neumonía viral o bacterial grave, pero las pruebas para confirmar esas enfermedades dan resultados negativos.

Funcionarios federales no confirmaron qué marcas o sustancias en los líquidos de los cigarrillos electrónicos podrían haber causado los problemas respiratorios observados, que derivaron en internaciones, asistencia respiratoria y, en algunos casos, comas artificiales.

Pero un denominador común frecuente en los pacientes es que habían estado vapeando productos con THC -la sustancia activa del cannabis- comprados en el mercado negro, la calle o Internet.

El estado de Nueva York sospecha que un aditivo que contiene vitamina E, que normalmente se utiliza como cápsula o crema para la piel, pueda ser la causa de las enfermedades al pulverizarse a altas temperaturas e inhalarse.

Pero autoridades federales de la salud se mostraron más cautas durante una conferencia telefónica realizada hoy y están a la espera de conclusiones claras de análisis de laboratorio.

"No se ha identificado una sustancia o molécula única, incluido el acetato de vitamina E, en todas las muestras analizadas", dijo Mitch Zeller, director del Centro para el Tabaco de la Agencia estadounidense de Drogas y Alimentos (FDA).

Prohibición de venta

En Michigan, su gobernadora, la demócrata Gretchen Whitmer, decretó la prohibición de la venta de cigarrillos electrónicos, convirtiendo al estado en el primero que veda esos productos.

En la otra vereda, la Asociación Estadounidense de Vaporizadores, que promueve los cigarrillos electrónicos como una ayuda para que los fumadores abandonen los cigarrillos tradicionales, denunció la decisión de Whitmer e indicó que apoyará cualquier demanda legal para anularla.

Estos vaporizadores se venden sin restricciones de edad y se ofrecen con sabores como jugos de frutas, caramelos y gomas de mascar.

Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) la nicotina, tanto en los cigarrillos regulares como en los electrónicos, es adictiva.

Otros ingredientes en el líquido de estos cigarrillos incluyen partículas ultrafinas que pueden llegar a los pulmones, compuestos para dar sabor como el diacetilo, un químico vinculado con graves enfermedades pulmonares, y metales pesados como níquel, estaño y plomo.