El cáncer de mama tiene el triste récord de ser la primera causa de muerte de las chilenas en edad reproductiva en el país. Sólo en 2020 más de 1.600 mujeres en Chile y 10 millones a nivel mundial, fueron víctimas de esta enfermedad. Cada año, en el mes de octubre, desplegamos campañas para sensibilizar sobre el tema, pero pareciera que no hemos llegado a tiempo.

Somos nosotras, las mujeres, las primeras llamadas a combatir esta enfermedad, sin importar en qué mes lo hagamos. Debemos lograr entre todas instaurar un simple hábito: la autoexploración mensual y la mamografía anual a partir de los 40 años (o a los 30 si tenemos antecedentes de cáncer en la familia).

Un bulto o engrosamiento de la mama, que la piel se sienta descamada o roja o se produzca una retracción de pezón son señales de alerta que indican la necesidad de consultar un especialista. Hablemos de este tema con nuestras madres, hermanas, hijas y amigas, y normalicemos la autopalpación como un método eficaz de detección precoz.

Los centros de salud también estamos convocados a facilitar la prevención, poniendo énfasis en ampliar y facilitar el acceso a la toma de mamografías para la comunidad, extendiendo su alcance geográfico y su accesibilidad. En esta tarea estamos en RedSalud a través de nuestras nueve clínicas y red de centros médicos a lo largo de Chile.

Desde el Instituto del Cáncer RedSalud, nuestro compromiso es con la prevención, la detección precoz y la investigación en torno al cáncer, para que el próximo mes de octubre no debamos lamentar más muertes. Seguiremos educando y generando conversaciones para que -entre todos- aprendamos a ver a la detección precoz del cáncer como una oportunidad para actuar y no como una sentencia. El 90% de los cánceres de mama detectados a tiempo tienen un buen pronóstico. Necesitamos que más mujeres lleguen a tiempo.

*Oncóloga médica y Director Médico del Instituto del Cáncer RedSalud.