El Ministerio de Salud (Minsal) ha confirmado nuevos casos de sarampión importado en nuestro país, una enfermedad producida por un virus altamente contagioso que afecta prioritariamente a los niños, principalmente los menores de 1 año, quienes aún no reciben la inmunización correcta y efectiva. Se transmite a través del contacto directo con secreciones nasofaríngeas de una persona que se encuentra infectada y, en pocas ocasiones, por diseminación aérea.
Los principales signos y síntomas que presenta una persona contagiada son similares a un resfriado común: fiebre alta sobre los 38°C (en niños puede superar los 39°C), tos irritativa, congestión nasal y presencia de secreción en conjuntivas.
El diagnóstico diferencial lo da la presencia de un exantema o ronchas rojas en la piel, que pueden durar entre 4 a 7 días. Las ronchas aparecen primero en la cara y se va diseminando al resto del cuerpo hasta llegar a ser generalizado.
No existe un tratamiento antiviral específico contra el sarampión. Los principales cuidados están dirigidos a evitar las complicaciones graves que pueda producir la enfermedad.
La OMS sugiere un tratamiento con medidas de soporte para todas las personas infectadas con el virus, que consta en:
• Manejar la fiebre (control estricto de la temperatura), administración de antipiréticos y administración de líquidos para prevenir la deshidratación.
• Suficiente ingesta de líquidos para evitar deshidratación.
• Garantizar una buena nutrición, evitando la malnutrición que podría aumentar el riesgo de otras infecciones que agraven el cuadro.
• Tratamiento antibiótico solo está indicado para tratar complicaciones como otitis, neumonías, conjuntivitis, etc.
El virus produce un estado de inmunosupresión que aumenta considerablemente el riesgo de contraer otras infecciones, principalmente a nivel ocular, que agravan su estado de salud y puedan provocar complicaciones irreversibles, por lo que se sugiere también el tratamiento con suplementos de Vitamina A.
Si estas medidas no son realizadas a tiempo en una persona ya contagiada, ésta tiene una alta probabilidad de producir otras infecciones que compliquen gravemente su estado de salud. Por eso es relevante poder identificar a tiempo a las personas en riesgo por exposición con quienes están contagiadas.
En Chile, todos los menores de 35 años están protegidos porque recibieron dos dosis de vacunas contra el sarampión en su vida. Se consideran un grupo de riesgo todas las personas nacidas entre 1971 y 1981, ya que no recibieron los esquemas que hoy se consideran protectores contra esta enfermedad.
Para poder saber si hemos recibido la doble dosis, todas aquellas personas consideradas como riesgo deben buscar sus antecedentes de vacunación para poder respaldar esta protección, de lo contrario es necesario vacunarse, de acuerdo a las recomendaciones emanadas por el Ministerio de Salud, ya que son considerados como protección insuficiente contra el virus del sarampión.
* Académica de la Escuela de Enfermería de Universidad de Las Américas