Robots que optimizan la rehabilitación, y que al mismo tiempo entretienen a los niños atendidos. Un estudio realizado en el Instituto Teletón de Concepción logró establecer que no existen diferencias estadísticas entre las terapias convencionales de rehabilitación de extremidad superior, y las realizadas con un particular robot que ha generado interés, tanto en médicos y tratantes, como también en los pacientes que utilizan este método.
A raíz de una donación que recibió el Instituto Teletón de Concepción desde la empresa suiza Hocoma, implementaron hace tres años esta terapia robótica en extremidad superior. “Nos prestaron un ejemplar, llamado Armeo Spring, y nosotros quisimos hacer un estudio para conocer cómo funcionaba este aparato. Con la terapeuta, Ana Aburto, trabajamos en este estudio para de entender qué tanto sirve esta terapia robótica, en comparación a la terapia ocupacional”, explica la Dra. Lorena Llorente, fisiatra y directora del Instituto Teletón de Concepción.
Esto se realizó midiendo la intensidad de este tratamiento, a través de veinte sesiones con el robot. “Los niños suelen estar más motivados para el robot, porque además hacen videojuegos en una pantalla, tratando de mover lo mejor posible sus extremidades”, afirma la Dra. Llorente.
Se eligieron a niños de edad preescolar y escolar, que siguieran instrucciones, que tuvieran una hemiparesia, es decir, una mano peor que la otra en un contexto de una parálisis cerebral. Y, además, para que esto fuese más complejo, las investigadoras le agregaron toxina botulínica a los músculos de los niños en rehabilitación.
Con una serie de test validados se pudo analizar y detectar cuáles eran las principales diferencias entre la misma terapia realizada por profesionales, y por un robot. “Para nuestra sorpresa, no hubo diferencias entre el robot y el terapeuta”, detalló la directora de Instituto Teletón de Concepción.
Terapeuta versus Robot
Según detalla la Dra. Llorente, si un terapeuta trabaja de manera correcta y protocolizada, equivale a 1 hora o 40 minutos de trabajo dirigido personalmente con solo un niño o niña. Sin embargo, con el uso de robots, este trabajo puede optimizarse y, alrededor de tres niños podrían estar realizando sus terapias al mismo tiempo.
“Además, a los niños les llama mucho más la atención el robot, porque es como un brazo que se ensambla y empiezas a jugar igual como que fuera una consola”, detalla la directora de Teletón en la Región del Bio Bio.
El logro que destaca la fisiatra de Teletón no apunta a que la terapia robótica pueda reemplazar la labor realizada por un terapeuta ocupacional, sino que a optimizarla y a tratar a más niños y niñas durante la misma cantidad de tiempo. “Tienes un terapeuta y tres robots funcionando en distintas estaciones. A partir de eso, esta misma terapia la puede hacer un terapeuta con tres máquinas, y en ese momento vienen niños durante 2 horas por estas estaciones”, explica la Dra. Llorente.
Esto, según cuenta la especialista, aumenta la intensidad de la atención, “porque al mismo tiempo se ve simultáneamente a tres niños. Al mismo tiempo, los niños vienen mucho más contentos, porque es mucho más entretenido, y además va cambiando el tipo de terapia que se les hace”.
Luego de realizar este estudio, el Instituto Teletón de Concepción obtuvo la donación del Gobierno Regional del Bío Bío para comprar uno de estos robots de terapia, y así crear un programa de rehabilitación de extremidad superior. Durante los últimos tres meses ha funcionado en el Instituto Teletón de Concepción el Armeo Spring, además de otros marcadores de movimientos, los cuales son capaces de mover a los niños en el ambiente virtual. “Igual como si fuera un joystick, pero acá es con la mano y se puede lograr una rehabilitación de hombro y codo”, manifiesta la Dra. Llorente.