¿Cuál es la actividad preferida de los chilenos en Fiestas Patrias?

Con el fin de comprender el constante cambio que está viviendo Chile, la empresa Cadem realizó una nueva versión de la encuesta “El Chile que viene”, que busca conocer cómo las personas de diferentes generaciones miran y viven el mundo, tanto desde sus sueños, anhelos, valores y motivaciones.

Sus mediciones se centran en todo lo relacionado a lo que representa Chile, de qué sienten más orgullo los y las chilenas, las características de la sociedad, y un ítem relacionado a Fiestas Patrias.

A la pregunta: ¿Qué tan cercano o identificado te sientes con estas cosas que son típicamente chilenas?, las Fiestas Patrias ocupan el primer lugar con un 84% de las preferencias, seguido de la Bandera (82%), y la Canción nacional (75%).

Sin embargo, en la medición generacional las Fiestas Patrias tiene una preferencia similar en todos los rangos etarios: 18-34 años (85%) 35-54 años (89%), 55+ años (81%).

Asimismo, también se midió qué actividades tienen pensado hacer los chilenos para estas festividades. Los resultados arrojaron que lo que más se hará este 18, es hacer un asado (68%).

Actividad que también tiene una preferencia similar en todos los rangos etarios: 18-34 años (76%) 35-54 años (70%), 55+ años (56%), lo que lo convierte en una de las comidas que más se consumen durante el feriado nacional.

De acuerdo a los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés), la carne roja aporta hierro, zinc y vitamina B, y es una de las principales fuentes de vitamina B12 en la dieta.

Bernardita Vignola, nutricionista de Clínica Universidad de los Andes, señala que las carnes tienen un mayor aporte de grasas saturadas y de colesterol. Pero, que “la recomendación para un adulto sano es consumir alrededor de dos veces o tres veces a la semana carnes de vacuno de cortes magro”

Sin embargo, en pacientes o personas con infartos al corazón, con antecedentes de colesterol alto, “sí hay que restringir aún más el consumo de carne” a quienes se suman pacientes con enfermedades como insuficiencia renal, añade la especialista.

Los CDC señalan en su sitio web, que si una persona consume más de 90 g (peso cocido) de carne roja o procesada al día, el Departamento de Salud y Asistencia Social recomienda reducirla a 70 g.

Algunas carnes tienen un alto contenido de grasas saturadas, que pueden elevar los niveles de colesterol en la sangre si se comen en exceso, además que es probable que exista un vínculo entre la carne roja y procesada y el cáncer de intestino.

También, de acuerdo a Vignola, la porción recomendada va a depender de si se es hombre o mujer, del peso y si realiza algún tipo de ejercicio. Pero el promedio, es de 0,8 a 1,2 g de proteína por kilo de peso en adultos.

“Que se traduce en promedio en un trozo del tamaño de la palma de la mano para mujeres son aproximadamente 100 g al almuerzo y en la cena, y para los hombres son aproximadamente 150 o 200 g. en el almuerzo y cena, o sea, 200 g en mujeres al día y entre 300 y 400 g al día en hombres”.

“Se puede reducir el consumo de grasas con la carne, eligiendo el corte adecuado” explica la nutricionista de Clínica U. de los Andes.

En el caso del pollo, se debe dar preferencia, a la pechuga de pollo y si se va a consumir el tuto largo o el tuto corto, se recomienda sacar el cuero antes de cocinar, lo mismo sucede con el pavo.

Según la nutricionista, los cortes más recomendables, porque tienen menos grasa son:

• Lomo liso.
• Filete.
• Pollo ganso.
• Posta.
• Punta picana.

Por su parte, los CDC recomiendan que otras alternativas para reducir el consumo de grasa al cocinar carne son:

• Asar la carne en lugar de freírla.
• Evitar agregar grasa o aceite adicional al cocinar carne.
• Asar la carne sobre una rejilla de metal encima de una fuente para asar para que la grasa se escurra.
• Intentar usar cantidades más pequeñas de carne y reemplazar parte de la carne con verduras, legumbres y alimentos ricos en almidón en platos como guisos.

Vignola señala que además de las carnes rojas, pollo o pavo, existen otras alternativas, con respecto a alimentos que aportan proteínas, y que son de mejor calidad antes que la carne de vacuno.

Es el caso del pescado, que aporta proteínas, aporta fierro, aporta zinc, también aporta micronutrientes como la vitamina b 12, ácidos grasos y omega 3, que son ácidos grasos esenciales que ejercen un efecto cardioprotector.

“Entonce no debemos cerrarnos en el consumo de un solo tipo de de carne, sino que equilibrar las distintos tipos de alimentos altos en proteína que hay” explica la especialista.

Asimismo, recomienda equilibrar el consumo, combinado carnes de vacuno de cortes magros, pavo, pollo y pescado, “y tratar de ojala aumentar el consumo de pescado”.

Por otro lado, recuerda que existen otras alternativas de proteínas vegetales, como:

• Las legumbres.
• La carne de soya.
• El tofu.

“Que sí tienen un contenido de proteínas, pero no tienen un gran aporte de estas vitaminas como la vitamina b 12 o de los minerales como el Fierro y el zinc, pero en ese caso se pueden consumir, pero siempre equilibrando la ingesta o suplementando con con alguna vitamina o mineral en caso de que hubiese deficiencias” concluye la nutricionista.