Una campaña en redes sociales destinada a sensibilizar a los chilenos sobre los peligros que enfrentan los cetáceos y su importancia para el ecosistema y los aportes que realizan para mitigar el cambio climático, lanzó Fundación Meri bajo el lema “Todo juntos”.

La iniciativa busca aunar todas las voluntades posibles para visibilizar la realidad que viven los mamíferos marinos en nuestras costas, constantemente en peligro por el tránsito marítimo. Sólo este año se han reportado cuatro ballenas muertas por colisión con embarcaciones.

“Todos juntos” es parte del proyecto The Blue Boat Initiative (BBI) -que lidera Fundación MERI y el Ministerio de Medio Ambiente- que instalará boyas con hidrófonos en el Golfo del Corcovado, área donde más ballenas azules se agrupan para alimentarse, para detectar la presencia de cetáceos y alertar a las embarcaciones su ubicación.

Ballena Jorobada en Chañaral de Aceituno. Enero de 2021

“A la fecha, el primer video de la campaña ha sido visto por más de 900 mil personas, en sólo 10 día. A través de él se busca motivar a las personas para que se sumen como ‘Vigías BBI’, es decir, como comunicadores y viralizadores de la iniciativa a través de sus propias redes sociales. Si el tema de los cetáceos permea a la opinión pública podremos preservar esta especie”, destaca Ana María Molina, directora ejecutiva de Fundación MERI.

Alcances del proyecto

The Blue BOAT Initiative tiene dos ejes de trabajo. El primero consiste en generar un sistema satelital de alerta temprana, para avisarle a las embarcaciones que navegan desde el Corcovado al sur, de la presencia de ballenas para que puedan tomar medidas concretas, o hacer las maniobras correspondientes para evitar que los cetáceos colisionen con ellos. El segundo eje tiene que ver con la captura de datos que permitan entender más y mejor los servicios ecosistémicos de estos cetáceos y otras especies marinas.

Esto, sumado a la normativa voluntaria existente, permitirá a las embarcaciones contar con mejor información para tomar los resguardos necesarios para evitar colisiones con grandes cetáceos.

“Todos juntos” es parte del proyecto The Blue Boat Initiative (BBI) -que lidera Fundación MERI y el Ministerio de Medio Ambiente- que instalará boyas con hidrófonos en el Golfo del Corcovado, área donde más ballenas azules se agrupan para alimentarse, para detectar la presencia de cetáceos y alertar a las embarcaciones su ubicación. Foto: gentileza Fundación Meri.

En lo tecnológico, este proyecto traerá a Chile la tecnología LIDO (Listening to the Deep-Ocean Environment), sistema de monitoreo acústico pasivo y de identificación de especies de ballenas, desarrollada por el Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas (LAB) de la Universidad Politécnica de Cataluña que lidera uno de los expertos más reconocidos en materia de investigación de acústica de ballenas, Michel André. Él es el encargado de preparar las boyas y sensores que se instalarán en el último trimestre del año.

Con esto, además, será más fácil establecer los trayectos que suelen realizar los cetáceos, generando información para que las embarcaciones puedan no solo reaccionar ante una alerta sino también prever un encuentro con estos animales.

La iniciativa también permitirá a las embarcaciones contar con mejor información para tomar los resguardos necesarios para evitar colisiones con grandes cetáceos.

“Lo importante es destacar que, al ser una iniciativa nacional de conservación, no es un proyecto exclusivamente científico o tecnológico, sino que apuntar a involucrar a todos los actores de la sociedad, incidiendo en los tomadores de decisión, para mejorar nuestra conservación marina”, explica Molina.

Añade que, en paralelo, se apunta además a levantar una institucionalidad que permitiese reunir al mundo académico, comunidades, tomadores de decisión y comunidad científica experta en el tema, levantando una serie de Mesas de Trabajo que se encuentran en diferentes niveles de desarrollo según el timing y proceso del proyecto. Estas mesas tienen como objetivo integrar los conocimientos y experiencias de estos actores.

“Junto con ello tienen una agenda programada que cubre campañas nacionales y otras líneas que buscan concientizar a la ciudadanía sobre el hecho de que el cambio climático es una problemática multidimensional y que Chile es un laboratorio natural único para la mitigación”, afirma la directora ejecutiva de MERI.