Cuatro fuertes temblores y la activación de un volcán marcan un sábado “sísmico”

Las últimas semanas han estado marcadas por la posibilidad de una erupción del volcán Villarrica, el que actualmente se encuentra en alerta amarilla, y ha mostrado una evidente actividad, acompañado de columnas de gas, fumarolas y eventos sísmicos.

Si bien aún no se produce una gran erupción, tanto autoridades como vecinos y turistas están en alerta frente a un evento de semejante magnitud, por lo que han tomado ciertas medidas.

Pero eso no es todo, ya que durante este sábado se volvieron a encender las alarmas, pero en el norte del país. Más precisamente el volcán Láscar (5.592 metros de altitud) ubicado en la Región de Antofagasta, el que registró un aumento de su actividad, acompañado de un sismo y una columna de humo de 6.000 metros.

“El día de hoy 10 de diciembre a las 12.36 hora local, se registró un elemento explosivo en el volcán Láscar, relacionado con una señal sísmica”, detalló un reporte del Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile (Sernageomin).

Producto de este aumento en la actividad del Láscar, se “generó en superficie una columna eruptiva, que de acuerdo con observaciones satelitales tuvo una altura aproximada de 6.000 metros sobre el nivel del cráter”, añadió.

Este volcán, que registró pulsos de similares características en 2006 y 2015, tuvo una erupción en 1993.

No fue una madrugada tranquila para los chilenos. Mientras la gran mayoría dormía, se presentaron tres sismos.

Según informó el Centro Sismológico Nacional de la Universidad de Chile el primero fue en San Pedro de Atacama a las 3.41 horas. El movimiento tuvo una magnitud de 5,6. Este evento telúrico ocurrió cerca del mencionado volcán Láscar.

Pablo Salucci, geógrafo de la Universidad Católica y académico de la Universidad San Sebastián, señala que lo ocurrido no es habitual, pero tampoco escapa de la realidad sísmica de nuestro país. “Se observaron dos sismos intraplaca y uno interplaca”.

El segundo, a las 4.25 en Navidad, región de O’Higgins, alcanzó una magnitud de 5,3. Este fuerte temblor se sintió en parte importante de la zona central, inclusive en la Región Metropolitana.

El sismo ocurrido en Navidad, “llamó la atención por su larga duración y un marcado movimiento de gran oscilación. También resulta interesante observar que sucede en el límite sur de la zona de silencio sísmico de la zona central”, añade Salucci.

Mientras que el tercero llegó a 5,0 en Ovalle, a las 5:48 horas.