Los científicos estiman que hace alrededor de 66 millones de años, un meteorito de unos 10 kilómetros de diámetro impactó contra la Tierra, provocando la extinción del 75% de las especies, incluidos los dinosaurios, que dominaban el planeta.
Desde la instauración de esta tesis científica, cada vez hay más certeza que en cualquier momento, la Tierra será impactada por un asteroide similar.
Se estima que el planeta recibe unas 100 toneladas diarias de polvo interplanetario, incluyendo pequeños meteoroides, es decir, más de 30.000 toneladas al año.
Por eso, una de las alternativas que manejan los científicos para evitar una nueva catástrofe como la que borró a los dinosaurios, es intentar desviar un posible asteroide en trayectoria de colisión. Y la Nasa está más cerca que nunca de probar si exste o no la tecnología para hacerlo.
Para eso diseñó una nave espacial bautizada DART, sigla en inglés de Double Asteroid Redirection Test, que será la primera misión del mundo en probar técnicas de defensa planetaria activa.
La misión tiene su lanzamiento programado para este jueves 24 de noviembre.
Se espera que DART despegue desde la Base de Vandenberg (California) a las 06.21 UTC, mediante un cohete Falcon 9 de Space X.
La nave espacial está diseñada para impactar un asteroide mientras viaja a una velocidad de aproximadamente de 24.000 kilómetros por hora. Su objetivo es el asteroide lunar Dimorphos (griego para “dos formas”), que orbita un asteroide más grande llamado Didymos (griego para “gemelo”).
A fines de 2022, DART afectará a Dimorphos para cambiar su órbita dentro del sistema de asteroide binario Didymos. El sistema Didymos es el candidato ideal para DART porque no representa una amenaza de impacto real a la Tierra, y los científicos pueden medir el cambio en la órbita de Dimorphos con telescopios terrestres.
Testigo de excepción de la operación será el LICIACube (Light Italian Cubesat for Imaging of Asteroid), un pequeño satélite de la Agencia Espacial Italiana que será desplegado desde la propia nave DART, que tomará imágenes de los efectos del impacto en la superficie y la pluma de eyección generada.
Aunque ninguno de los asteroides representa una amenaza para la Tierra, la colisión con Dimorphos permitirá a los investigadores demostrar la técnica de deflexión junto con varias tecnologías nuevas y recopilar datos importantes para mejorar nuestras capacidades de modelado y predicción de la deflexión de asteroides.
Esas mejoras ayudarán alos científicos a prepararse mejor en caso de que un asteroide sea descubierto como una amenaza para la Tierra.