El pasado martes, el Centro de Extensión del Senado y las nueve universidades de la Región de Valparaíso impulsaron una jornada sobre el Congreso Futuro, actividad que este año contó con la participación de Divya Chander, experta en neurociencia; salud pública; futurismo; conciencia y digitalización mental, conferencista de prestigio internacional, quien fue invitada por la UNAB.
Su ponencia se tituló “Digital health and biometrics: hacking humans” (Salud y biometría: hackeando humanos).
“La salud digital ha creado nuevas oportunidades, pero también nuevos riesgos. La pandemia de Covid-19 fue una situación que nos obligó a tomar acciones rápidamente en el mundo. Tuvimos que adaptar la salud digital a las necesidades urgentes del momento. Aparecieron artefactos que se pueden colocar de manera implantable; aumentaron las citas remotas con doctores y apreciamos otros elementos para posiblemente monitorear nuestra salud desde casa”, explicó la doctora.
En su ponencia, Chander mencionó la creación de lo que se denomina “The Global Inmune System”, ya que la pandemia expuso vulnerabilidades globales a enfermedades infecciosas emergentes, anunciadas por brotes anteriores, que no dieron como resultado inversiones adecuadas en vigilancia, colaboración internacional y respuesta.
La doctora visualiza la bioseguridad de próxima generación integrada en sistemas naturales y diseñados en todo el mundo, listos para detectar, interceptar y responder rápidamente a las amenazas biológicas. Esta propuesta propone pasos específicos que deben tomarse para reducir los riesgos futuros para la salud pública, la estabilidad económica y política y la seguridad alimentaria.
La científica agregó “que hay una nueva habilidad de leer y escribir a los dos códigos de la vida. El primero es el código genético. Somos capaces de leer secuencias genéticas y además de escribir y editar el genoma. El problema con todo esto es que incrementa los riesgos, por lo que todo lo que implantamos en nuestro cuerpo puede ser pirateado. Esto crea nuevos problemas de la privacidad que debemos reflexionar”.
La conferencista agradeció la invitación realizada por la UNAB expresando además que “un gobierno que promueve un evento sobre tecnologías y ciencias del futuro brinda una señal muy positiva. Si se invitan a los científicos para dar su opinión cuando se elaboran las leyes, se analizan temas sobre la ética, la implicación, las ramificaciones o las consecuencias no previstas de una iniciativa. Compartir con otros científicos y científicas ha sido un real privilegio”.
Gerald Pugh, vicerrector de la UNAB, sede Viña del Mar, mencionó que “es muy importante lo que se está realizando en el Congreso Nacional. Es una invitación a pensar sobre el futuro, lo que nos permite estar en conocimiento de los avances más recientes de la ciencia y de la tecnología a nivel mundial de manera de ir plasmando nuevas políticas públicas que vayan considerando la evolución de las diversas disciplinas que se abordan en este evento”.
La Dra. Carla Taramasco, directora Instituto de Tecnología para la Innovación en Salud y Bienestar de la UNAB, participó en el panel de Neurociencia y Conciencia Digital del Congreso Futuro, junto a Divya Chander y otros académicos de universidades de la Región. “Divya Chander nos mostró distintos adelantos en investigación y de tecnologías que se pueden usar dentro de los centros de salud. Como Universidad estamos en este mismo camino y asumimos el desafío de llevar los distintos desarrollos tecnológicos que impulsemos para mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas de nuestro país”, expresó la académica.
Sobre la conferencista
La Dra. Divya Chander es física, neurocientífica y futurista. Estudió en Harvard; en la Universidad de California en San Francisco; en la Universidad de California en San Diego y en el Instituto Salk. Actualmente, es la presidenta de Neurociencia, docente en la Facultad de Medicina en la Universidad de Singularity. Es becaria visitante en el Departamento de Medicina de Stanford, informática biomédica, y durante 8 años fue miembro de la Facultad de Anestesiología de Stanford.
Su formación de postdoctorado en Stanford (en los laboratorios de Deisseroth y de Lecea) le permitió utilizar canales de ión activados por luz insertados en el ADN (optogenética) para estudiar los sueños y los cambios de conciencia en el cerebro. En el quirófano aplica tecnologías de electroencefalografía (EEG) para comprender como luce el cerebro humano y las conexiones subyacentes cuando pierden y vuelven a la conciencia. Su objeto de estudio es comprender los mecanismos neuronales de la conciencia, asimismo entender la evolución de la conciencia humana derivando al mejoramiento de las personas. Está trabajando en dispositivos que leen y esquematizan el cerebro (mapeo cerebral, neuromodelación), y lo conectan a máquinas con el propósito de obtener diagnósticos y terapias. Su trabajo también se cruza con los estudios de la longevidad humana.
Además, Chander trabaja en el campo de las ciencias de la vida espacial. Fue finalista para la selección de astronautas y ex alumna de la Universidad Espacial Internacional. Ha realizado simulaciones remotas de rescates de trauma, anestesia y cirugía en entornos análogos a Marte con médicos en los EE. UU., Francia y la base Concordia en la Antártida. También participó en un consorcio que elaboró una hoja de ruta para estudiar el efecto de la microgravedad y la radiación en el sistema nervioso, el sistema cardiovascular, la cognición y el sueño.