Los dolores de cuello o lumbares son los más comunes cuando estamos pasando por un periodo complejo.
Tener la columna en óptimas condiciones es sinónimo de buena salud, y cuidarla es fundamental. Sin embargo, ante situaciones de estrés tienden a empeoran los dolores en pacientes que ya tienen una enfermedad lumbar, produciéndose un dolor de mayor intensidad y/o constante.
En
las personas que tienen dolores cervicales o lumbares, las situaciones de estrés de distinta índole, pueden acrecentar los dolores y molestias.
Además, el estrés perjudica la calidad del sueño, lo que produce aún más contracturas y dolor.
Es por eso que es recomendable visitar a un especialista,
ya que existen tratamientos efectivos para distintas patologías.
Para evitar malestares, es recomendable realizar actividad física constantemente, ya que el ejercicio mejora la irrigación, aumenta la oxigenación, mejora el sistema cardiorrespiratorio, fortalece los músculos y libera endorfinas que protege del estrés. Andar en bicicleta, caminar, nadar, el yoga y pilates son buenas prácticas que previenen la aparición de ciertas patologías.
Si bien el deporte ayuda muchísimo, también se recomienda elongar. Está comprobado que tener una buena postura, sentarse correctamente, con la espalda derecha y evitar andar agachados, con la espalda encorvada, permite mejorar considerablemente la posición de la columna y evitar complicaciones.
*Traumatólogo especialista en columna de Clínica Universidad de los Andes