El telescopio espacial Webb ha completado con éxito el despliegue de su parasol de cinco capas, que tiene el tamaño de una cancha de tenis, un proceso crítico para el éxito de la misión.
Este gran protector solar consiste de cinco capas, de las cuales tres fueron desplegadas el 3 de enero y las dos restantes este 4 de enero.
En su cuenta de Twitter, la Nasa destacó el paso crítico dado para el éxito de la misión, ya que “aproximadamente el 75 por ciento de las 344 fallas de ‘único punto’ posibles han sido eliminados”.
El parasol está compuesto de una gran hoja de material recubierta de metal. El material está diseñado para proteger la óptica principal de la luz y el calor del Sol, de modo que el telescopio pueda ver la tenue luz procedente de estrellas y galaxias distantes. El segmento de parasol incluye las capas y sus mecanismos de despliegue, que también incluye la solapa de moldura.
Las capas del parasol proporcionan aislamiento para la óptica y ayudan a disipar el calor. Cada una de las cinco capas sucesivas es tan delgada como un cabello humano y está hecha de una membrana de kapton recubierta con aluminio para reflejar la reflectancia.