Un segundo paciente con ébola murió en el noroeste de la República Democrática del Congo, según informó en una conferencia este martes la Organización Mundial de la Salud (OMS), días después de que se declarara un nuevo brote de la mortal enfermedad.
Las pruebas genéticas mostraron que la infección confirmada la semana pasada en la ciudad de Mbandaka era un nuevo “evento de propagación”, una transmisión desde un animal infectado, y no estaba relacionada con ningún brote anterior, dijo el Instituto Nacional de Investigación Biomédica de aquel país.
La segunda víctima era una mujer de 25 años, quien era cuñada del primer caso confirmado, que lamentablemente también falleció, anunció la OMS en su cuenta de Twitter.
Asimismo, el presidente de la OMS, Tedros Adhanom, señaló que la organización “está apoyando al gobierno (del Congo) para ampliar las pruebas, el rastreo de contactos y las medidas de salud pública”. Además de anunciar que las reservas de vacunas contra el Ébola en Goma y Kinshasa están siendo transportadas a Mbandaka para que la vacunación pueda comenzar.
“El gobierno y el pueblo de la República Democrática del Congo tienen una gran experiencia en detener brotes de ébola y la OMS los apoyará para hacer lo que sea necesario”, reiteró.
Nuevo brote
La República Democrática del Congo está experimentando su decimocuarto brote de ébola desde 1976, incluyendo uno en 2018-2020 en el este mató a casi 2.300 personas, el segundo mayor número de víctimas registrado en la historia de la fiebre hemorrágica.
El brote actual, que fue declarado el 23 de abril por las autoridades sanitarias del país africano, es el sexto solo desde 2018 en Mbandaka, la capital de la provincia de Ecuador, el más frecuente en la historia del ébola en el Congo, ya que el más reciente terminó en diciembre de 2021.
Según el sitio de la OMS, el primer paciente infectado, era un hombre de 31 años, que comenzó a mostrar síntomas el 5 de abril, y, tras más de una semana de cuidados en su casa, el 21 de abril buscó tratamiento en un centro de tratamiento del ébola para recibir cuidados intensivos, pero murió ese mismo día.
Tras reconocer los síntomas, los trabajadores sanitarios del lugar enviaron inmediatamente muestras para realizar pruebas de detección de la enfermedad por el virus del ébola, explicó la OMS.
La segunda paciente comenzó a experimentar los síntomas 12 días antes de su fallecimiento, y al menos 145 personas estuvieron en contacto con los casos confirmados, por lo que su salud está siendo vigilada de cerca, afirmó la Organización.
“El tiempo no está de nuestra parte”, dijo el Dr. Matshidiso Moeti, director regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para África. “La enfermedad ha tenido dos semanas de ventaja y ahora estamos jugando a ponernos al día. La noticia positiva es que las autoridades sanitarias de la República Democrática del Congo tienen más experiencia que nadie en el mundo en el control rápido los brotes de ébola.”
Síntomas
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el virus del ébola se describió por primera vez en 1976 cerca del río Ébola, en lo que hoy es la República Democrática del Congo, y donde los bosques ecuatoriales del país son un reservorio natural del virus.
Desde entonces, el virus ha surgido periódicamente y ha infectado a personas en varios países africanos, y de acuerdo al Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS), los síntomas suelen comenzar repentinamente, entre 2 y 21 días después de contraer la enfermedad.
Los síntomas febriles son los más comunes de la Enfermedad por el Virus del Ébola (EVE), aunque también puede causar hemorragias internas y comprometer las funciones de algunos órganos. “La infección puede causar entonces una hemorragia interna, así como una hemorragia por los oídos, los ojos, la nariz o la boca”.
El NHS reconoce los siguientes síntomas como signos “típicos” del virus del ébola:
-Temperatura alta
-Dolor de cabeza
-Dolor articular y muscular
-Dolor de garganta
-Debilidad muscular severa
Estos síntomas suelen ir seguidos de: diarrea, vómitos. erupción cutánea, dolor de estómago, y reducción de la función renal y hepática.