Cada año las alergias son un problema que se hace cada vez más presente en las población mundial y que genera un trastorno del sistema inmunitario que reacciona desproporcionadamente a sustancias a priori benignas para el organismo como el maní, los ácaros del polvo o el polen denominados alérgenos, y que puede generar reacciones cutáneas, respiratorias (asma) o generalizadas, con un desbocamiento global del sistema inmunitario en caso de shock anafiláctico.

En general en cualquier momento del año, aproximadamente entre el 20-25% de los chilenos pueden llegar a sufrir rinitis alérgica y presentar síntomas como agua nasal (rinorrea) estornudo, congestión y prurito (picazón el los ojos, nariz, oídos, parte posterior de la garganta principalmente), detalla la Dra. María Pía Zañartu, inmunóloga del Programa de Alergias de Clínica Universidad de los Andes.

Un aumento de alergia en los últimos años, que ha sido producido principalmente por dos factores. “Uno es la predisposición genética a desarrollar una alergia y el otro, es el impacto ambiental donde el individuo genéticamente susceptible va a desarrollar alergia” sobre todo en una ciudad como Santiago, donde hay altos niveles de alérgenos, añade la especialista.

Por eso, un nuevo estudio publicado en The Journal of Allergy and Clinical Immunology, y dirigido por el chileno Fernando Sepúlveda, bioquímico de la Universidad de Chile, y la científica Gaël Ménasché, ambos doctores en Inmunología y codirectores del laboratorio “Bases moleculares de anomalías en la homeostasis inmune”, en el Instituto Imagine de la Université Paris Cité, Francia, decidieron investigar sobre un mecanismo que podría aportar futuros tratamientos contra las alergias.

Gaël Ménasché y el chileno Fernando Sepúlveda, ambos parte del equipo de investigación y directores del laboratorio Bases moleculares de anomalías en la homeostasis inmune, en el Instituto Imagine, París, Francia.

La investigación identificó por primera vez el papel clave del gen Rab44 en la liberación de las moléculas que causan las alergias -proceso conocido como degranulación de los mastocitos- y que podría constituir mejorar el lugar del organismo donde un fármaco ejerce su acción para futuros tratamientos profilácticos.

Pero, ¿qué son los mastocitos y que rol cumplen en una reacción alérgica?

Los mastocitos son células de la inmunidad innata, un tipo de glóbulo blanco y que se han implicado en la aparición de reacciones alérgicas, y “es precisamente este fenómeno de desgranulación el que conduce a reacciones alérgicas inflamatorias”, explica Ménasché.

“En conjunto, este trabajo sugiere que Rab44, cuya expresión está restringida a los mastocitos y granulocitos, podría ser un nuevo blanco terapéutico para tratar las reacciones alérgicas al inhibir específicamente la degranulación de los mastocitos”, dice Sepúlveda.

En los futuros proyectos el quipo de investigación intentará desarrollar un enfoque terapéutico de este tipo para prevenir y tratar las alergias de todo tipo, ya que no importa qué tipo manifestaciones alérgicas sean (cutáneas (urticaria, dermatitis), respiratorias (asma), digestivas (alergias alimentarias) o generalizadas (anafilaxia)), todas están provocadas por la activación de los mastocitos que liberan mediadores preformados.

“Por lo tanto, la inhibición específica de la degranulación de los mastocitos permitirá tratar todos los tipos de alergias que afectan a cualquier paciente alérgico” señala Ménasché.

Rol del gen Rab44

Los mastocitos, encargados en desencadenar una reacción alérgica, en una fase posterior a la reacción también sintetizan y secretan numerosas citocinas y quimiocinas que participan en la regulación de la respuesta inflamatoria.

“Mediante el uso de las tijeras moleculares CrispR-Cas9 en ratones, pudimos inactivar el gen Rab44 y así bloquear parcialmente la señal que desencadena el transporte de vesículas que contienen mediadores inflamatorios hacia la pared de los mastocitos“ y reducir considerablemente el proceso de degranulación, lo que reduce al mismo tiempo la reacción alérgica, explica el investigador.

Equipo de investigación

Anteriormente en 2016, el laboratorio también había destacado un papel similar del gen Kif5b. Sin embargo, la función de este gen en el tráfico intracelular era universal, común a todas las células del organismo y, por tanto, rebasaba la función específica de los mastocitos.

“La ventaja del gen Rab44 es que su función se limita a los mastocitos. Sabemos que estas células inmunitarias están específicamente implicadas en las reacciones alérgicas. Esto lo convierte, por lo tanto, en un excelente objetivo terapéutico” añade la investigadora.

A pesar que aún falta desarrollar una terapia que inhiba específicamente a Rab44, y probar su eficacia en modelos experimentales antes de poder establecer un ensayo clínico en humanos, por ahora los planes son, entender los mecanismos moleculares involucrados en este proceso de degranulación.

En tanto, ambos investigadores comentan que en este proyecto para identificar una nueva terapia contra las alergias participarán muchos investigadores, ingenieros, estudiantes de doctorado y posdoctorado, y gracias al Programa de Doctorado Internacional de la Universidad París, “estamos reclutando estudiantes internacionales que estén interesados en hacer un doctorado”.

De estar interesado en este tema de investigación no dude en ponerse en contacto con los investigadores a través del correo: lab.menasche.sepulveda@institutimagine.org.

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