¿Su gato o perro de repente tiene una explosión de energía y realiza hazañas atléticas en la casa que pondrían celoso incluso a un medallista de oro? Bienvenido al mundo de los zoomies.
Los zoomies (”explosión” en inglés) involucran períodos intensos de actividad de alta energía que incluyen correr, girar, saltar y rodar. Todo a la máxima velocidad.
Un nombre científico propuesto es Períodos de Actividad Aleatoria Frenética (FRAP, por su sigla en inglés). En conejos, estos períodos de alta actividad se denominan “binkies“. Pero muchos dueños de perros y gatos simplemente los llaman “zoomies”.
Entonces, ¿por qué nuestros animales experimentan los zoomies? ¿Y es algo que debería preocuparnos?
¿Por qué los animales se vuelven “zoomies”?
Piense en cuándo su gato o perro se vuelve “zoomie”. Es posible que vea zoomies después del baño, zoomies en el parque para perros, zoomies de medianoche y zoomies buenos y salidos de la nada. El desencadenante puede ser la excitación o un aumento repentino de la estimulación.
En los gatos, un desencadenante comúnmente informado es usar la caja de arena. Esto puede explicarse por una sensación de euforia después de defecar. Esto posiblemente se deba a que las deposiciones grandes estimulan el nervio vago, lo que genera sensaciones positivas y una disminución de la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
“Zoomies” se puede caracterizar como un juego ya que los dos comportamientos comparten muchas de las mismas características. Esto haría que los “zoomies” fueran intrínsecamente placenteros, en otras palabras, muy divertidos.
Si ocurren como parte de la rutina de juego regular de su animal, esto indica que su animal está feliz y se está divirtiendo.
Si bien aún no sabemos si es más probable que ocurran en ciertos momentos del día, o más en algunas razas en comparación con otras, los consideramos una indicación general de un alto nivel de entusiasmo y probablemente de muy buen humor.
Los humanos también son animales y algunas personas también experimentan lo que podría ser similar a los “zoomies”.
¿Alguna vez ha tenido una sensación repentina de emoción intensa y energía sobrante? Tal vez hayas sentido la necesidad de saltar, sacudirte o bailar, antes de que desaparezca y vuelvas a tu configuración habitual.
Esto puede deberse a una multitud de cosas: una situación emocionante o novedosa, un pico de energía después de un período prolongado de descanso o quizás un cambio en su química interna. Tal vez experimentó un alza de adrenalina provocado por la excitación, la sobreestimulación o el estrés.
¿Los zoomies son siempre una señal de que tu gato o perro está feliz?
Es importante recordar que los animales son individuos y, al igual que nosotros, el motivo por el que se comportan de la forma en que lo hacen es complejo y multifacético. Al evaluar el comportamiento de su animal, es esencial evaluar también el contexto.
Los “zoomies” se mencionan mucho en línea, pero hay una falta real de investigación científica sobre qué los causa, con qué frecuencia ocurren o incluso una definición oficial de lo que son.
Pregúntate: ¿estoy invitado al “zoomie”?
En perros y gatos, los “zoomies” pueden incluir una invitación para que otros se unan; en los perros, esto suele ser una reverencia de juego, en la que el perro parece “reverenciar” a otro en un esfuerzo por indicar que está ansioso por jugar, seguido de una pausa. comúnmente visto en el juego diádico (juego entre dos o más individuos).
En los gatos, una invitación puede incluir interactuar físicamente contigo o darse la vuelta repetidamente. Si este es el caso, es probable que su animal experimente entusiasmo y deseo de interactuar con usted.
¿Qué hago durante un brote de “zoomie”?
A menos que haya un elemento de peligro inmediato (como “zoomies” en o cerca de una carretera), no hay razón para impedir que su gato o perro disfrute de su explosión de diversión.
Los gatos y los perros suelen ser superestrellas a la hora de evitar obstáculos, incluso a gran velocidad. Si tienes la suerte de recibir invitaciones para participar en el caos, siéntete libre de unirte al juego.
Disfrutar de actividades compartidas como jugar con tu perro o gato puede tener muchos beneficios para la relación humano-animal. ¡También es muy divertido para ti!
¿Cuándo debo preocuparme?
Los “zoomies” suelen ser una parte completamente normal (y divertida) de ser un perro o un gato. A veces, sin embargo, puede ser un síntoma de estrés o de una afección médica subyacente.
Como siempre, el contexto es clave. Debe consultar con su veterinario si su perro o gato muestra el comportamiento durante largos períodos de tiempo (en particular, dando vueltas o comportamientos que ocurren durante tiempos de confinamiento). Estos pueden ser signos de un trastorno de comportamiento repetitivo.
Si tiene dificultades para distraer o detener el comportamiento, o si está provocando lesiones, busque asistencia veterinaria.
Incluso si usted mismo no recibe la llamada de los “zoomies”, tómese un momento para detenerse y disfrutar de la diversión de su perro o gato. A veces todos necesitamos correr salvajemente.
*Susan Hazel, profesora asociado, Escuela de Ciencia Animal y Veterinaria, Universidad de Adelaide
**Ana Gonçalves Costa, estudiante de doctorado, Universidad de Adelaide
***Julia Henning, candidata a doctorado, Universidad de Adelaide
