El 4 de julio de 2005, la misión Deep Impact (Impacto Profundo) de la Nasa se acercó al cometa 9P/Tempel 1. Una sección de la sonda, llamada el impactador, se separó y se lanzó hacia su núcleo, con el que hizo impacto 34 horas después, abriendo un cráter de 150 m de diámetro, para así estudiar por primera vez el interior de un cometa.
Si bien el objetivo no era desviar su curso, la tecnología de entonces probó que era posible impactar una roca espacial de estas características.
Y es es lo que precisamente hará este lunes la misión DART, una pequeña nave espacial que impactará un asteroide llamado Dimorphos, una especie de mini luna que orbita un asteroide más grande llamado Didymos.
El impacto está previsto a las 19.14 hora de la costa Este de EE.UU., es decir, a las 18.14 de Chile.
Aunque ninguno de los dos representa una amenaza para la Tierra, la colisión con Dimorphos permitirá a los investigadores probar si es posible cambiar el curso de un asteroide y así evitar un futuro probable impacto y evitar que la humanidad corra la misma suerte que los dinosaurios.
La misión busca demostrar si es posible realizar una técnica de deflexión junto con varias tecnologías nuevas y recopilar datos importantes para mejorar nuestras capacidades de modelado y predicción de la deflexión de asteroides.
“La idea de impactar un asteroide binario es muy sencilla: estos orbitan unos a otros y por ende al impactar lo que va a producir es un pequeño cambio en la velocidad del más pequeño y eso va a generar un cambio en la órbita de unas pocas horas. Entonces, en el transcurso de una semana o un mes, vamos a poder medir con certeza cuánto cambia el tiempo qué se demoran en orbitar el uno al otro”, explica Juan Carlos Beamin, astrónomo de la Fundación Chilena de Astronomía.
Cómo ver el inédito impacto contra el asteroide
La Nasa transmitirá en vivo el evento en su canal de YouTube, además de a través de su aplicación y su sitio web. La transmisión se puede visualizar en vivo a través de este link de YouTube.
La transmisión comenzará a las 17.00 de Chile y parte de las imágenes que se mostrarán del impacto mismo provendrán de un pequeño satélite que acompaña la misión.
Se trata de CubeSat del tamaño de una caja de zapatos, llamado LICIACube, que fue desarrollado por la Agencia Espacial Italiana y que ya dejó la nave nodriza para acompañar a distancia la misión y grabar todo el proceso de impacto.
Además, los investigadores y los espectadores tendrán la posibilidad de ver de cerca el sistema de asteroides Didymos, aunque sea brevemente, gracias al generador de imágenes DRACO a bordo de DART.
Este instrumento sirve principalmente como sistema de navegación óptico de la nave espacial, capturando imágenes que ayuden a la nave a alcanzar su objetivo. DRACO introducirá sus imágenes en el algoritmo de navegación en tiempo real autónomo (SMART Nav), un sistema que, en las últimas horas de la nave, guiará a DART de manera precisa y automática a Didymos.
Lanzada en noviembre de 2021, la nave espacial DART (Double Asteroid Redirection Test) de aproximadamente 600 kilogramos estará en un punto a 11 millones de kilómetros de la Tierra cuando impacte en Dimorphos, que tiene solo 160 metros de ancho. Para complicar aún más las cosas, la nave espacial se acercará a la roca espacial a aproximadamente 6,1 kilómetros por segundo. Dimorphos orbita Didymos, que tiene aproximadamente 780 metros de diámetro, cada 11,9 horas.
Según Beamin, la posibilidad de fallar el blanco es muy poco probable porque se han hecho mediciones de la órbita y hay correcciones que se pueden hacer en tiempo real. “Es decir, DART tiene cómo corregir la ruta o trayectoria hacia el asteroide y almacenó -por así decirlo- ‘un poco de bencina’ en caso de que sea necesario encender los motores”, explica el astrónomo.
Mientras que el asteroide Didymos mantendrá prácticamente intacto su movimiento alrededor del Sol, se espera que la colisión desvíe la órbita del pequeño asteroide Dimorphos de manera pequeña pero inconfundible, una fracción de un uno por ciento, lo suficiente como para que se pueda medir con radares y telescopios terrestres.
Para comprender completamente el impacto de DART, una vez que el polvo se haya asentado, la misión Hera de la ESA se lanzará en 2024 y llegará al sistema de asteroides Didymos dos años después para realizar un mapeo científico visual, láser y de radio de alta resolución de la luna del asteroide y evaluar las consecuencias de el impacto.
Respecto a qué puede salir mal con la misión, Beamin dice que están el no saber del todo la composición interna del asteroide. “Por ende, no sabemos con exactitud qué tan fuerte va a ser el impacto si puede causar más daño del previsto”.
El astrónomo agrega que no sabemo si Didymos tiene un núcleo sólido. “Si es como un compilado de rocas el impacto podría ser que algunas de esas salten y además de generar el cambio de velocidad también no solo dejar un cráter, sino sacarle más pedazo al asteroide”, lo que no está previsto como parte de los objetivos de la misión.