Con el objetivo de analizar las relaciones que se dan entre los principales grupos indígenas con la población no indígena del país, la Universidad Católica dio a conocer la segunda versión del Estudio Longitudinal de Relaciones Interculturales, que aborda temas desde distintos ámbitos como sentido de pertenencia a un pueblo originario, el uso de la lengua originaria, las políticas públicas y las relaciones intergrupales, entre otras.
El análisis fue realizado por el Centro de Estudios Interculturales e Indígenas (CIIR) y da un seguimiento a unas tres mil personas en promedio que participaron del estudio en sus dos versiones: 2016 y 2018. Estas pertenecen a los pueblos andinos (Aymaras, Quechuas, Likan Antai, Colla) y Mapuches de la Región Metropolitana y de cuatro regiones del sur).
Entre los principales cambios de percepción de los que este estudio da cuenta, se destaca el aumento de personas encuestadas que se identifica con un pueblo originario, que en el caso del pueblo mapuche aumentó en un 23%, mientras que la autoidentificación con los pueblos andinos creció en un 12% (ver infografía).
"Esta encuesta busca llevar el pulso del pueblo indígena y de las situaciones que suscitan uno de los mayores conflictos en el país y cómo varía la actitud de la población respecto de las diferentes etnias", explica Eduardo Valenzuela, decano de la Facultad de Ciencias Sociales UC e investigador del CIIR.
El académico agrega que "s por esto que entrevistamos a las mismas personas en ambas ocasiones y esperamos continuar con la misma cohorte (grupo de personas) en las encuestas futuras".
Apoyo a la causa indígena
Asimismo, llama la atención el creciente apoyo de personas no indígenas a la causa de los pueblos originarios, que se registra entre las mediciones de 2016 y 2018. En el caso de los no mapuches se incrementó en seis puntos porcentuales, pasando de un 33% a un 39%, y entre los no andino alcanzó un 44% de los encuestados.
En este ámbito, el estudio demostró que existe un alto índice de percepción en las comunidades indígenas y no indígenas (superior al 70%) de que existe un conflicto entre los pueblos y el Estado de Chile. Por el contrario, se muestra una disminución de la cantidad de personas que (en torno al 12%) que en 2018 justifican el uso de la violencia por parte de Carabineros.
"Existe un conocimiento entre las personas de que existe un conflicto en los pueblos originarios, y el que ha tenido más persistencia y notoriedad es el mapuche. En este estudio vemos que las personas conocen sobre éste, que hay un creciente nivel de adherencia a sus demandas pero que espera que no escale la violencia, tanto con Carabineros, con los agricultores, y los ataques incendiarios", dice Valenzuela.
Hay que recordar que entre ambas mediciones dos hechos han marcado un hito en el conflicto entre pueblo mapuche y el Estado: la operación Huracán (la presunta implantación de pruebas por parte Carabineros para implicar a comuneros en atentados incendiarios y que se encuentra investigando el Ministerio Público); y el asesinato del comunero mapuche Camilo Catrillanca, en noviembre de 2018 en la comunidad autónoma de Temucuicui (Ercilla), por parte de un integrante del Comando Jungla de Carabineros.
Las demandas
Entre las políticas públicas demandadas, y que registra un mayor incremento en el nivel de apoyo principalmente entre los no mapuches, se cuenta la restitución de tierras (que pasó del 50% al 60% de los entrevistados); la autonomía territorial (del 42% al 53%); el establecimiento de escaños resguardados en el Parlamento (del 40% al 47%); y el reconocimiento constitucional de Chile como un país multicultural (del 76% al 81%).
"Hay una enorme adhesión que suscita el reconocimiento constitucional de los pueblos originarios. En este sentido existe una deuda del Estado chileno, los parlamentarios y los distintos gobiernos que no lo han logrado conseguir", puntualiza el académico.