Un día después de que el gobierno mexicano confirmara los tres primeros casos de coronavirus en ese país, las noticias en el mundo por la enfermedad que motivó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a declarar emergencia sanitaria internacional a fines de enero, se han precipitado.

En Francia todos los actos que congreguen a “más de 5.000 personas” en un lugar cerrado y también algunos al aire libre, como la media maratón prevista en París el domingo, fueron suspendidos debido al recrudecimiento del COVID-19, anunció hoy el gobierno francés.

Estas medidas, tomadas en una reunión excepcional del ejecutivo de ese país, también llevaron a suspender la última jornada del Salón de la Agricultura, el domingo, una cita muy importante para el sector que se celebra en París. El ministro de Salud, Olivier Véran, precisó el sábado que en las últimas horas ha habido 16 nuevos casos en Francia, para un total de 73 contagios.

Esto se sumó a la decisión tomada por las autoridades del fútbol italiano de suspender cinco partidos de la primera división del fútbol de ese país, entre ellos el importante duelo entre Juventus y el Inter de Milán de Alexis Sánchez. Todos fueron aplazados para el 13 de mayo.

Primeros casos

Mientras que, también en Europa, otros países como Azerbaiyán y Mónaco han confirmado los primeros casos de coronavirus dentro de sus fronteras, según han confirmado las autoridades de esos países.

En el caso de Azerbaiyán, el Gobierno ha apuntado a que el afectado es un ciudadano ruso que ha dado positivo en la prueba para detectar el coronavirus, según ha informado ‘News.Az’.

Por su parte, las autoridades sanitarias de Mónaco han anunciado que una persona está afectada por el coronavirus y ha sido trasladada del Hospital Princesa Grace, donde se encontraba en aislamiento en espera del resultado de la prueba del virus, hacia el Servicio de Infectología del Hospital Universitario de Niza.

El brote de coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan, en la provincia de Hubei, ha dejado en el país asiático más de 2.800 muertos y 79.200 afectados, según el último balance de las autoridades sanitarias de China.