La composición corporal de hombres y mujeres es diferente y por lo mismo, la velocidad y potencia muscular que pueda lograr los deportistas también. En el fútbol femenino, estas diferencias llevan a que en la práctica deportiva, las jugadas sean un poco más lentas y menos violentas, aunque de a poco y según la envergadura física de las deportistas, el juego también esté cambiando.
Las lesiones que sufren jugadoras y jugadores también tienen algunas diferencias. De acuerdo a informes que ha realizado la Fifa, el promedio de lesiones en las jugadoras, sobre todo en las más jóvenes, está por debajo del promedio de los varones. Un estudio que revisó las lesiones ocurridas en 370 partidos de 13 torneos internacionales femeninos: la Copa Mundial Femenina de la FIFA (1999, 2003, 2007), los Juegos Olímpicos (2000, 2004, 2008) y los mundiales juveniles (sub-17 2008, 2010; sub-19 2002, 2004 y sub-20 2006, 2008, 2010) mostró que en todos ellos se produjeron 844 lesiones, lo que representa 2,3 lesiones por partido. En los varones, esta cifra llega a 2,5 lesiones por encuentro. Lo que preocupa a médicos, entrenadores y a las autoridades del fútbol, es que con los años, el número de lesiones en las mujeres está aumentando, a diferencia del juego de los varones que viene a la baja.
Dos de cada tres lesiones en las mujeres se produce en las piernas, especialmente en tobillos, rodillas y muslos. La segunda parte del cuerpo más afectada fue la cabeza, seguida de tronco y brazos. En cuanto a localización de la lesión, no hay diferencias con los varones dice la FIFA.
El traumatólogo Fernando Radice, traumatólogo especialista en Medicina Deportiva de Clínica U. de los Andes, señala que las principales lesiones que presentan las mujeres futbolistas son los desgarros musculares y tendinitis rotuliana relacionada debido a las cargas de entrenamiento e intensidad del juego.
César Kalazich, médico deportólogo de Clínica Meds, señala que el fútbol femenino hoy es más exigente y, en general, las mujeres hoy están mejor preparadas y son más atletas que hace algunos años y coincide en que la tasa de lesiones de ellas es un poco menor.
Rodilla
Una de las lesiones frecuentes en las mujeres es la rodilla. "Ellas tienen un poco más de lesiones de ligamento cruzado anterior. Son más propensas a sufrir este daño que los hombres. Hay diferencia entre los volúmenes musculares de los cuádriceps e isquiotibiales y eso se postula como la razón que hace que la mujer podría tener más lesiones de ligamento cruzado anterior. También se cree que los ligamentos tienden a ser más laxos en las mujeres. Hay varios factores, pero es un hecho que las mujeres se rompen más este ligamento", dice Kalazich.
"La mujer tiene cuatro veces más riesgo de sufrir una rotura de ligamento cruzado anterior de rodilla que el hombre. Esto se debe a factores estructurales: tienen tendencia a tener más frecuentemente genu valgo (alteración del eje que consiste en tener rodillas juntas y pies separados), déficit de masa muscular del cuádriceps, gestos técnicos deportivos mal trabajados (como por ejemplo, la caída en un salto o giro) y alteraciones hormonales que favorecen la alteración del colágeno y laxitud de los tejidos", dice Radice.
Otro tipo de lesión que es frecuente en ellas es la contusión en la cabeza. "Probablemente tiene que ver con técnicas de salto, son más vehementes a la hora de ir a cabecear", dice el especialista de Clínica Meds.
Desarrollo muscular
Prevenir este tipo de lesiones es posible si se trabaja en forma dirigida el desarrollo de la musculatura de estas deportistas para lograr un balance entre cuádriceps e isquiotibiales y así para proteger a la rodilla en maniobras de cambios de dirección, dice Radice.
"Es también clave automatizar gestos deportivos como saltos, giros, freno, cambios de dirección que se conoce como trabajo neuro propioceptivo para que los riesgos de rotura del ligamento cruzado disminuyan. La Fifa aplicó este tipo de trabajo en diferentes equipos y lograron disminuir notoriamente el índice de lesiones de rodilla en mujeres futbolistas", explica el traumatólogo.
"La mujer que no está preparada físicamente para este deporte, da mucha ventaja en cuanto al rendimiento. Las jugadoras europeas, como las suecas, alemanas, holandesas, son buenas para la pelota pero también son fuertes y rápidas, no solo habilidosas. En Chile estamos un poco más atrás en fútbol femenino. Se les enseña a jugar al fútbol y son bastante extraordinarias técnicamente, pero en la parte física hay que mejorar. Se ha ido mejorando y por eso mismo, les ha ido mejor a las selecciones femeninas", señala Kalazich