Son conocidas las condiciones privilegiadas de los cielos del norte de Chile que les han permitido posicionarse como un espacio privilegiado a nivel mundial de la astronomía. Pero también el sur del país cuenta con zonas con mucho potencial para la astronomía y para el astroturismo.
Una investigación liderada por la doctora en astrofísica, académica de la Universidad Autónoma de Chile, Angie Barr, junto al asesor científico de la coordinación regional del eclipse en la región de La Araucanía, Carlos Morales Marín, identificó siete sitios con potencial de turismo astronómico en la zona de La Araucanía ubicados en puntos específicos de los parques nacionales Conguillio, Villarrica, Malalcahuello y la Reserva Nacional Villarrica, que bien podrían convertirse en nuevas rutas para observar el espacio y promover el desarrollo espontáneo de la astronomía y la astrofotografía.
Cielos de La Araucanía
Cuando pensamos en turismo astronómico nuestra mente nos lleva de inmediato al norte del país. Un escenario perfecto dada las características de los cielos, la amplitud de los espacios y el clima que ofrece más de 300 días despejados en un año.
Por otro lado, si pensamos en el sur inmediatamente imaginamos lluvia y cielos nublados. Ante este escenario, no podríamos siquiera imaginar que cuando las nubes se van, los cielos de La Araucanía ofrecen espectáculos majestuosos para la observación astronómica.
Gracias a esta investigación, que se desarrolló en las semanas previas al eclipse de sol, se identificaron estos siete lugares: Lago Conguillio en Parque Conguillio; los Nevados de Sollipulli en la Reserva Nacional Villarrica. En el Parque Nacional Villarrica se identificaron 4 sectores correspondientes a la Laguna Quillelhue; zona de picnic y miradores 1 y 2. Por último, el sector de Los Arenales en Parque Nacional Malalcahuello, ubicado en los 1740 m s.n.m. de altura.
La investigación determinó que estos sectores cumplen con las características de oscuridad del cielo, campo de visión amplio, altitud, accesibilidad para vehículos y otros servicios en los alrededores, que los convierten en un destino ideal para el astroturismo. Una iniciativa que podría contribuir además con el levantamiento de la actividad económica y el desarrollo del turismo post pandemia en una de las zonas más azotadas por los efectos del coronavirus.
Entre las principales conclusiones del estudio destaca que, en general, los índices de oscuridad de estos lugares son mayores a 21.5 mag/arcsec^2, valor mínimo necesario para considerarse oscuridad al nivel de un observatorio astronómico.
Barr, explica que en estos lugares es posible observar galaxias como las nubes de Magallanes y fenómenos del sistema solar como la luz Zodiacal: “Todo esto es visible sin la ayuda de ningún instrumento, solamente a simple vista, siendo el escenario perfecto para un tour astronómico. Es un espectáculo fascinante, ya que tiene la mezcla perfecta entre naturaleza con sus maravillosas araucarias junto al cielo estrellado. Siempre y cuando esté despejado”.
La información recabada será entregada por los investigadores a Conaf para su posterior divulgación dentro de los parques.