La antropóloga estadounidense, Amber Case (32), es una de las personas que más ha estudiado la relación entre máquinas y humanos. Desde la utilización de una herramienta manual hasta un refrigerador inteligente que cuenta las calorías que consumes. Su preocupación más grande: que si antes la tecnología ampliaba nuestra autonomía, ahora la reprime.

En conversación con Qué Pasa, la antropóloga, y diseñadora de experiencias de usuario, especifica que a medida de que consideremos a un objeto tecnológico como una extensión de nuestro cuerpo, y que dependemos cada vez más de él, nos convertimos en cyborgs. ¿Qué hacer si no hay internet o si le queda solo una barra de batería al celular?

La atención es un bien escaso. "El teléfono llora, y lo recogemos de nuevo. Nos ocupamos de docenas de notificaciones que no suelen ser de humanos. Son anuncios y otras interrupciones. ¿Cuántos de nosotros podríamos pasar un día leyendo un libro sin querer revisar nuestros teléfonos?", reflexiona. Autora de Tecnología calmada y Diseñando con sonido, la experta postula que el desarrollo y la innovación tecnológica debe estar al servicio de las personas, pero sin distraer o manipular las emociones de cada uno.

Homo Connectus

Un estudio realizado por la empresa Cisco predijo que para 2020 van a existir 20 billones de objetos conectados a internet. No solo por un incremento de computadores y smartphones, sino por el aumento exponencial que generó la entrada del Internet de las cosas (IoT) en 2009. La conectividad llegó a un reloj que muestra las mismas notificaciones que un smartphone o una casa inteligente que se administra de manera autómata, por ejemplo.

Pero este exceso de conectividad tiende a absorber el tiempo de las personas. "Una de las razones por las que estamos muy conectados es que cada vez que hay una pausa en nuestras vidas donde podemos reflexionar o estar con la comunidad, tenemos menos oportunidades para esto. Así que lo reemplazamos revisando nuestros teléfonos", resalta Case.

"La mejor tecnología nos da poder. Está ahí cuando lo necesitamos, e invisible cuando no lo está", afirma la antropóloga. Hace énfasis en los objetos tecnológicos que están disponibles cuando se le requiere, y que no intenten captar repetitivamente la atención del usuario a cada momento. A eso, Amber le llama "Tecnología calmada".

Amber Case vendrá a Chile como invitada a dar una clase magistral en el Congreso Futuro 2019. Se presentará este jueves 17 de enero en Valparaíso, y el viernes 18 en Santiago. La antropóloga espera entregar su mensaje y que "el público chileno tenga una nueva perspectiva sobre cómo usan la tecnología".