Durante las últimas semanas, los astronautas de la Nasa Butch Wilmore y Suni Williams han estado atrapados en la Estación Espacial Internacional (ISS) después de que el primer viaje tripulado de la nueva nave espacial Starliner de Boeing sufriera un problema. Las preocupaciones planteadas por Boeing y la Nasa sobre problemas con los propulsores y varias fugas de helio (el helio se utiliza en el sistema de motor de Starliner) han impedido que la nave realice el viaje de regreso según lo previsto.
La Nasa ha dicho ahora que es posible que los astronautas tengan que quedarse quietos hasta el próximo cambio de tripulación programado para agosto, posiblemente en otra nave.
La asombrosa foto que capturó un telescopio terrestre al apuntar al espacio
Boeing y la Nasa están tratando de darle un giro positivo a la extensión diciendo que están probando los sistemas necesarios para misiones Starliner más largas. Pero el proyecto ya ha sufrido varios retrasos, ya que originalmente estaba previsto que despegara por primera vez con tripulación en 2017. Esto, combinado con los últimos problemas, plantea dudas sobre todo el programa Starliner.
Pero antes de todas estas dudas, el CST-100 Starliner logró un hito el pasado 6 de junio, cuando se transformó en la segunda nave privada de la Nasa para llevar astronautas a la órbita terrestre baja, después de la Crew Dragon de SpaceX.
Y el hito de la nave espacial aproximándose a la Estación Espacial fue captado por vario telescopios que escanearon los cielos durante la misión.
Uno de ellos fue un equipo de sistemas láser y electroópticos de la propia Boeing, que grabó el asombroso momento en que Starliner se aproximaba a la Estación Espacial utilizando la tecnología avanzada de seguimiento de satélites diurnos de la compañía con sede en Albuquerque, Nuevo México.
Las fotografías y el vídeo fueron tomados por un sistema diseñado y ensamblado por Boeing en Albuquerque, Nuevo México, según informó la propia empresa. El sistema combina un telescopio de gran apertura, un sensor infrarrojo de onda corta que puede captar imágenes de satélites en órbita durante el día y una montura especializada controlada por ordenador diseñada para compensar la rotación de la Tierra.
El seguimiento satelital durante el día permitirá monitorear las órbitas de los satélites las 24 horas del día, lo que hoy en día se realiza principalmente durante un corto período antes del amanecer y después del atardecer debido a la tendencia de la luz ambiental a sobrecargar los sensores, explicó Boeing en un comunicado.
Según Boeing, al ampliar la ventana de tiempo en que se pueden rastrear los satélites, la tecnología está posicionada para brindar una variedad de beneficios potenciales, que incluyen:
- mayor conciencia del dominio espacial
- capacidades mejoradas de alerta temprana
- Mejora de la comunicación y la coordinación
- Inteligencia más precisa a través del monitoreo de amenazas en tiempo real
“Este evento de alto perfil nos permitió demostrar el valor del seguimiento satelital diurno a una audiencia más amplia”, dijo en el comunicado Ron Dauk, gerente de sistemas láser y electroópticos y líder del sitio de Albuquerque. “Nuestra capacidad utiliza principalmente hardware comercial disponible en el mercado modificado con la tecnología de navegación inercial, de sensores y radiométrica de Boeing, lo que da como resultado un diseño simple y asequible que ofrece un rendimiento excepcional”, agregó.
Boeing ha sido un actor importante en las misiones espaciales con la Nasa durante décadas, desempeñando un papel importante, por ejemplo, en el programa del transbordador espacial. Esta relación continúa con el papel de la compañía en el cohete Space Launch System (SLS) que enviará astronautas en su camino a la Luna.
La empresa ha sido uno de los contratistas más grandes y admirados de la industria aeroespacial. Sin embargo, los problemas con el Starliner se produjeron poco después de incidentes ampliamente publicitados con aviones Boeing, por lo que la corporación podría prescindir de más problemas con sus naves espaciales tripuladas.