“La primera persona que me contactó fue Camila Vallejo. Me llamó un domingo”, rememoró en una entrevista con Qué Pasa el ahora exministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación sobre cómo se gestó su llegada al gabinete del Presidente Gabriel Boric.
“El día martes recibí un Whatsapp del presidente, me llamó y conversamos y me dijo oficialmente y me entregó las expectativas que tenía el gobierno respecto a eso. Agradeció mi disponibilidad y se transformó en algo real… fue una alegría con válvula apretada porque no podía decir nada. No tuve ninguna duda en aceptar”, agregó quien fuera investigador del Instituto de Ciencias Biomédicas (ICBM) y vicerrector de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile, y el primer ministro de Ciencia de la administración Boric.
Ahora, el saliente científico carga con dos marcas: ser el primer comunista en llegar a esta cartera, pero también en el primer ministro de Ciencia a quien se le pide la renuncia, aunque con la salvedad que apenas es la segunda persona que ocupa este cargo, pues la cartera fue recién creada en 2018.
Las razones de su salida no fueron muy claras, pero desde Palacio trascendió que Salazar habría realizado algunas tareas en su Ministerio que no fueron muy bien catalagodas, particularmente jugarse por la posible fabricación de una vacuna en Chile, algo que no estaba ni en el programa ni en las prioridades del presidente.
De hecho, el ministro realizó una viaje a Cuba que buscaba generar conocimiento en la isla para intentar replicar la tecnología cubana en el país, un viaje en el que también estaba contemplado que fuera la ministra de Salud, María Begoña Yarza, viaje del que sin embargo se bajó poco antes de embarcarse.
También trascendió que entre los elementos que se barajaron en su salida el gabinete fue el bajo nivel de conocimiento que la población tenía de él de acuerdo a las encuestas. Ya en mayo, era el jefe de cartera menos reconocido, quien -según la encuesta Cedem- lograba sólo un 16% de conocimiento.
En su oportunidad, y de acuerdo a un artículo de La Tercera, desde el Ministerio de Ciencia explicaron que pese al bajo nivel de conocimiento del ministro Salazar, “en casi dos meses de gobierno, hemos desplegado una labor conectada con las necesidades de las personas. Trabajamos intensamente en un aumento presupuestario para la ciencia, para que Chile cuente con sus propias plantas para fabricar vacunas y para cerrar las brechas de género en el ámbito de la ciencia. Es natural que en tan poco tiempo no todos seamos igual de conocidos para la opinión pública, particularmente quienes venimos de la academia”.
De Suecia a la Universidad de Chile
De acuerdo a un perfil publicado por La Tercera en enero, poco después de su nombramiento como ministro de Ciencia, Salazar ha enfocado su carrera académica en temas de inmunología antitumoral, desde la investigación básica a los ensayos clínicos, y es conocido por ser el subdirector del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia desde el 2009 y por ser Vicerrector de Investigación y Desarrollo de la Universidad de Chile desde el 2014.
El militante del Partido Comunista también ha sido reconocido por sus aportes en los tratamientos de diferentes tipos de cáncer, tema del que ha publicado dos libros y más de 70 publicaciones científicas. Además ha fundado dos empresas spin off, Oncobiomed en 2002 y Bionex en 2007.
El doctor de la Región Metropolitana estudió en Suecia durante una década. De 1988 a 1992 se dedicó a su licenciatura en Ciencias y Biotecnología en la Universidad de Uppsala en Suecia, y de 1992 a 1998 realizó su doctorado en Ciencias Médicas e Inmunología en el Instituto Karolinska
Regresó a Chile en 1999 para ser parte del Programa Disciplinario de Inmunología del Instituto de Ciencias Biomédicas, y el mismo año comenzó su carrera como profesor en la Universidad de Chile, lugar donde ha sido director de 13 tesis de doctorado, 8 magíster, y ha hecho clases de más de 13 pregrado.