Se trata del segundo reglamento que se promulga de la ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) pero el primero que toca directamente a la ciudadanía. Y es que hoy -tras más de una década de trabajo- se publicó en el Diario Oficial el decreto que establece metas de recolección, valorización y otras obligaciones asociadas a envases y embalajes -no reutilizables-, lo que da inicio a la implementación de la Ley de Reciclaje en Chile, “algo muy importante porque nos involucra a todos”, dijo la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, esta mañana.
“Quisimos cambiar la forma en que reciclamos en nuestro país, que no seamos solo las personas las que vayamos a los puntos limpios, sino que crear un sistema de gestión que vaya y recolecte en nuestras casas el reciclaje, puerta a puerta, de manera de poder masificar esto en Chile”, agregó la ministra.
En concreto, lo que hace este decreto es obligar a las distintas empresas productoras a hacerse cargo de sus desechos y crear “sistemas de gestión” para recolectar y revalorizar los materiales -de envases y embalajes- que vienen asociados a lo que comercializan, con el objetivo de prevenir la generación de residuos. En este caso, el reglamento incluye cartones para líquidos, metales, papel y cartón, plásticos y vidrios.
Es decir y tal como lo explica el MMA: “si compro una bebida, ¿qué pasa con el envase plástico o la lata después de que la tomé? El decreto busca que las empresas que las producen organicen y financien un sistema que permita reciclarlos”.
Si bien es el segundo reglamento en entrar en vigor tras la aprobación de la ley REP, es el primero que se hace a escala masiva y que involucrará puntualmente a las personas. En enero ya había sido publicado el decreto que fija metas de recolección y valorización para los neumáticos. Con todo, ambos reglamentos son parte de los seis “productos prioritarios” que establece la iniciativa, junto a pilas, aceites lubricantes, artículos eléctricos y electrodomésticos y baterías.
En este ítem, las empresas estarán obligadas a informar de los distintos productos que se venden para que el Ministerio del Medio Ambiente tenga una cuantificación de la cantidad de envases y embalajes que entrarán al mercado. De acuerdo al artículo 7º del documento, sin embargo, la responsabilidad extendida del productor será aplicable a aquellos que introduzcan en el mercado bienes de consumo envasados o embalados, cuyos envases estén compuestos por, al menos, uno de los cinco materiales indicados anteriormente -se estima que más de 14.500 empresas estarán afectas a esta regulación-. Sin perjuicio de lo anterior, la medida no considera a productores que califiquen como microempresas ni los productores que introduzcan en el mercado menos de 300 kilogramos de envases al año.
Los productores, además, deberán inscribirse en el Registro de Emisiones y Transferencias de Contaminantes (RETC) e indicar si el sistema de gestión que aplicarán será individual o colectivo. También deberán organizar y financiar la recolección de los residuos de envases en todo el territorio nacional y hacerse cargo de su almacenamiento, transporte y tratamiento. Igualmente, deberán cumplir con las metas de recolección y valorización de los residuos de envases, cumplir con las obligaciones asociadas que les correspondan y asegurar que la gestión de los residuos de envases se realice por gestores autorizados y registrados.
Una de las formas en que se realizará la recolección será mediante un camión de reciclaje que comenzará a pasar por todos los hogares del país. De manera piloto, los camiones recolectores ya funcionan en 200 mil hogares de Chile, aunque la idea es que el número se incremente y logre alcanzar al 80% de los domicilios de todo el territorio nacional. Este 2021, de todas formas, se implementarán en el 10%.
Con la aprobación de este decreto, manifestó la ministra Schmidt, lo que se busca “es que podamos pasar de un 12,5% que reciclamos hoy a lo que se recicla en países desarrollados y superar el 60%. Los chilenos reciclamos muy poquito”.
Además, aseguró que se realizarán fiscalizaciones: “tenemos todos los antecedentes de cuánto vende cada empresa y fiscalizaremos con la Superintendencia de Medio Ambiente cuánto de lo que se introduce, se recicla. Este es un tema muy relevante porque hoy muchas veces tenemos desconfianza de que finalmente cuando nos pasan a buscar la basura esta se mezcle con el reciclaje y todo el esfuerzo que se realiza termine contaminado”.
Metas de recolección
Los productores de envases domiciliarios estarán obligados a cumplir, a través de un sistema de gestión, con las siguientes metas de recolección y valorización de residuos, respecto del total de envases domiciliarios introducidos por ellos en el mercado nacional:
Durante los cuatro primeros años de vigencia de las metas, los productores podrán cumplir hasta un 50% de las metas correspondientes a cada subcategoría, con una cantidad de toneladas equivalente de cualquiera de las otras subcategorías, excluyendo al vidrio.
Los productores de envases no domiciliarios estarán obligados a cumplir, a través de un sistema de gestión, con las siguientes metas de recolección y valorización de residuos, respecto del total de envases no domiciliarios introducidos por ellos en el mercado nacional:
Durante los cuatro primeros años de vigencia de las metas, los productores podrán cumplir hasta un 100% de las metas correspondientes a cada subcategoría, con una cantidad de toneladas equivalente de cualquiera de las otras subcategorías.
El decreto indica, igualmente, que para efectos de acreditar la recolección y valorización de los residuos de envases sólo podrán considerarse aquellos que hayan sido recolectados dentro del país. A los dos años, comenzarán a aplicarse las multas en caso de incumplimientos, que pueden llegar a las 10.000 UTA, es decir, casi $ 6.200 millones de pesos.
Asimismo, las municipalidades deberán elaborar ordenanzas para que los vecinos que cuenten con el servicio del “camión del reciclaje” separen correctamente sus envases, de lo contrario estos no serán retirados. Si no lo hacen, las entidades también se expondrán a multas.
Por otra parte, en el corto plazo, se establece la obligación de instalar puntos limpios o centros de acopio que garanticen el acceso a estas instalaciones en el 75% de las comunas de Chile. De esta manera, en cuatro años se instalarán 350 nuevos puntos limpios, los que serán operados por el sistema de gestión, con altos estándares de calidad.
El sistema de gestión, que operará estas 350 nuevas instalaciones de recepción y almacenamiento, deberá incorporar a los recicladores de base en al menos el 50% de ellos.