Efecto de la Ley de Etiquetado: Compra de bebidas azucaradas disminuyó un 24%
Estudio de consumo de bebidas publicado en la revista Plos Medicine indica que reducción es mayor a la lograda por otros países que han implementado este tipo de medidas.
En 2016 se implementó la Ley de Etiquetado y Publicidad de Alimentos de Chile. ¿El objetivo? Disminuir los altos índices de sobrepeso y obesidad que existen en el país, siendo las bebidas azucaradas uno de los productos más consumidos.
Por esa razón, un grupo de especialistas de la U. de Carolina del Norte (Estados Unidos), del Instituto Nacional de Salud Pública de México y del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Chile (INTA), realizaron un estudio que evaluó los impactos que ha tenido esta ley en las compras de bebidas azucaradas en los hogares chilenos, en comparación a las realizadas antes de que se implementara.
El trabajo, publicado por la revista Plos Medicine, se basan en el análisis de las compras hechas entre el 1 de enero de 2015 y el 31 de diciembre de 2017. El resultado muestra que las compras de bebidas azucaradas en los hogares bajó en 22,8 mL per cápita por día, lo que equivale a un 23,7%.
Camila Corvalán, médico del INTA y parte del estudio, dice que desde un punto de vista de salud pública, esto es muy importante: "La reducción del consumo de bebidas azucaradas es casi tres veces mayor a lo que hemos observado con políticas exitosas, como aumentarle el precio este tipo de productos. Esto es muy relevante porque muestra que políticas bien enfocadas, bien dirigidas, tienen la posibilidad de efectivamente mejorar la alimentación de la población".
La disminución en la compra de estos productos implica que los chilenos consumieron 12 calorías menos y 2,7 gramos menos de azúcar per cápita en comparación al periodo anterior a la Ley de Etiquetado. Por otro lado, hubo un aumento de 4,8% en las compras de bebidas sin sellos.
En el estudio también se analizaron las compras de bebidas "altas en" dependiendo del nivel socioeducativo del jefe o jefa de hogar, resultando que la disminución en las compras de bebidas azucaradas era similar entre las viviendas con mayor y menor nivel educativo.
Uno de los resultados que llamó la atención de los autores del estudio, fue la reducción en el consumo de jugos y lácteos con azúcares.
Corvalán recomienda que la población, sobre todos los niños, beban agua. "No hay ningún reemplazo que supere, en términos en capacidad de hidratación y nutricionales, el consumo del agua. Lo cierto es que las bebidas con azúcar no representan ninguna contribución nutricional para la población. No hay nada que nos aporte y justifique su consumo", aclara.
Admiración internacional
El estudio en el que participó Corvalán fue destacado por medios internacionales como The Guardian y The New York Times, los que resaltaron los resultados positivos de la política implementada en el país.
Otros países han intentado tomar medidas similares, pero no han logrado diferencias significativas en el consumo de bebidas "altas en". Por ejemplo, en Inglaterra, se etiqueta con color rojo a los productos altos en azúcares.
En Israel, Uruguay y Perú, por ejemplo, han adoptado las etiquetas de advertencia, sin embargo estas iniciativas dejan una arista afuera, la que está relacionada con la promoción de alimentos poco saludables y la venta de ellos en establecimientos escolares.
Corvalán explica que las políticas parecidas a la Ley de Etiquetado, como es el impuesto a las bebidas azucaradas en México, persisten una vez que son implementadas e incluso tienden a aumentar. Por lo tanto, dice, "lo que esperamos observar al cabo de la implementación total de la ley, son efectos de similar magnitud o incluso superiores. Actualmente estamos realizando los análisis correspondientes, ya que recién se cumplió la implementación total de la ley el año 2019".
"Lo que corresponde ahora es seguir promoviendo políticas que favorezcan el cambio de hábitos en la población. En la medida que construyamos políticas que aseguren ambientes o entornos que promuevan decisiones que sean más saludables, vamos a lograr que las personas tomen decisiones más sanas", señala Corvalán.
Otros estudios
Estudios anteriores ya habían mostrado una disminución en el consumo de bebidas azucaradas producto del alza en ese impuesto, considerando cifras de consumo entre 2011 al 2015, que correspondía a tres años antes de esta modificación y uno después. Los resultados en esa ocasión mostraban que hubo una reducción del 21,6% en compras de bebidas azucaradas, lo que se tradujo en 15,1% menos de azúcar consumida al mes.
La investigadora del INTA cree que la Ley de Etiquetados ha tenido un mayor éxito debido al conjunto de medidas que implica. "El hecho de que la ley no solo considere el uso de estos sellos negros, sino la promoción de alimentos "altos en" dirigida a niños y la restricción de la venta de estos alimentos en espacios escolares, reúne una serie de prácticas para fomentar la alimentación saludable. Este conjunto de medidas resultan más efectivas que una sola política en particular. Lo que hace bastante sentido".
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