Narón es una pequeña localidad en Galicia, España, donde el 40% de su población tiene obesidad o sobrepeso. Pero Carlos Piñeiro Díaz, un médico local, ha ideado un pionero plan para que sus vecinos pierdan 100.000 kg en dos años.

"Esto había que pararlo", dijo el médico en una nota en el diario El Mundo. De sus 39.000 habitantes, 15.000 vecinos estaban por encima de su peso recomendado. Seis de cada 10.

Por ello, en vez de recetar pastillas o regímenes milagrosos, diseño un innovador plan, al que bautizó, sugerentemente, "100.000 motivos de peso".

El título busca precisamente que los vecinos combinadamente pierdan 100.000 kilos en dos años, de manera natural, sin fármacos, sin pastillas, sin dietas extremas, ni menos pasar por el pabellón. Su plan solo consigna aplicar comida saludable, disminuir la ingesta de azúcar y sal y aumentar la actividad física, que más que apuntarse en un gimnasio, busca incentivar las caminas o el uso de la bicicleta.

En total se inscribieron 4.000 vecinos, incluyendo Marián Ferreiro, alcaldesa de Narón, junto a sus concejales, comercios, asociaciones, y restaurantes.

A seis meses de instaurado el plan, los habitantes ya han logrado bajar en promedio 2,2 kilos. Y aunque en un principio solo se inscribieron 4.000, la cifra de interesados crece día a día.

A noviembre, los vecinos ya habían logrado bajar 41.300 kilos.

La idea ha cruzado fronteras. La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aplaudido el proyecto y en mayo pasado, la Unión Europea le otorgó el Premio Europeo de la Obesidad 2018 como mejor programa de participación pública, frente a 42 países. Y el próximo 15 de noviembre, recibirá el premio a la mejor campaña nacional de publicidad de la salud en España.