La temperatura media del planeta este siglo subiría 3,2 grados, incluso si se cumplen los compromisos de reducción de emisiones enmarcados en el Acuerdo de París, lo que traería "impactos climáticos destructivos" al estar lejos del objetivo de mantener el aumento por debajo de 1,5 grados, alertó hoy la ONU.
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente lanzó esta advertencia en su informe anual sobre la brecha de emisiones, que compara las reducciones reales con las que necesita la lucha contra el calentamiento global y se lanza para servir como guía en la próxima Cumbre del Clima de Madrid (del 2 al 13 de diciembre).
Aún no es suficiente
El estudio concluye que las emisiones globales deben reducirse un 7,6 por ciento cada año entre 2020 y 2030 para cumplir el objetivo de no superar una subida de 1,5 grados este siglo, y para ello las promesas de disminución de emisiones de la comunidad internacional deben ser cinco veces más ambiciosas que las actuales.
El informe concluye que en la última década las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero aumentaron un 1,5 por ciento anual en la última década y en 2018 alcanzaron un récord histórico de 55,3 gigatoneladas de equivalente a CO2.
Más de 13 gigatoneladas provienen de China, con diferencia el mayor emisor pero no obligado todavía a una reducción en términos absolutos de sus emisiones por su condición de país en desarrollo, mientras que en segundo lugar, con más de 6 gigatoneladas, se encuentra Estados Unidos, retirado del Acuerdo de París en 2017.
De seguir esta tendencia, la temperatura media podría subir este siglo hasta unos intolerables 3,9 grados, aunque con las promesas de reducción de emisiones (como las de la Unión Europea, que ha fijado bajarlas un 40 por cien hacia 2030) ese aumento podría quedar en los antes mencionados 3,2 grados, una cifra tampoco suficiente.
El programa medioambiental de Naciones Unidas subraya que 2020 será un año "crucial para la acción climática", en el que se espera que los distintos países aumenten sus promesas de reducción durante la Cumbre del Clima de Glasgow, aunque según su directora ejecutiva Inger Andersen "no se puede esperar más". "Nuestro fracaso colectivo a la hora de actuar pronto y enérgicamente en el cambio climático significa que ahora debemos conseguir fuertes reducciones de emisiones", subrayó, advirtiendo que "cada ciudad, cada región, cada negocio, cada individuo, debe actuar ahora".
El Acuerdo de París determinó el objetivo de mantener la subida de la temperatura media del planeta por debajo de los dos grados este siglo en comparación con épocas preindustriales, aunque el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) consideró que se debe intentar no superar los 1,5 grados.
Sobrepasar esa subida de la temperatura, de acuerdo con el IPCC, aumentaría la frecuencia e intensidad de adversos fenómenos climáticos tales como las olas de calor, sequías, inundaciones o tormentas en los próximos años.