¿Qué tan comprometido están los chilenos con el voluntariado? Un estudio indagó en ese aspecto y lo comparó con el resto de los países de América. El análisis detalla que los niveles más altos se observan en Paraguay, donde el 57,3% de los encuestados asegura hacer trabajos voluntarios, seguido de Estados Unidos (41,8%) y Canadá (38,9%). Los niveles más bajos se encuentran en Chile (29%), Brasil (28%) y Perú (22%).
El trabajo, realizado por Activa Research en sociedad con WIN (Worldwide Independent Network of Market Research), exploró opiniones y percepciones en torno al trabajo voluntario mediante 30.890 entrevistas en 41 países, entre los que se incluyen Alemania, Argentina, Brasil, Canadá, Chile, España, Estados Unidos, Filipinas, Finlandia, Francia, Italia, Japón, México, Perú, Polonia, Reino Unido, Suecia, entre otros.
Si bien el nivel de voluntariado expresado por los chilenos y chilenas es bajo (29%), Catalina Carreño, gerente de la unidad de Marketing de Activa Research, explica que es una cifra que se encuentra en línea con los resultados observados a nivel mundial, donde un 28,5% declara haber realizado trabajo voluntario en el último año.
Sin embargo, "Chile se posiciona por debajo del promedio del Continente Americano, el que alcanza un 33%", aclara.
Educación
En el caso de Chile, indica Carreño, se observa que el nivel educacional está fuertemente relacionado con el nivel de voluntariado que realizan las personas: niveles más altos de educación demuestran niveles más altos de trabajo voluntario. Es así como un 19,4% de quienes no tienen educación o solo tienen educación básica, reportan realizar algún tipo de trabajo voluntario; mientras que aquellos con los niveles de educación más altos, declaran un 47,9%. "Los resultados muestran también que la ocupación juega un rol fundamental", sostiene.
El cómo socialmente puede modificarse esa conducta, Carreño resalta en ello el valor de la educación y promoción de actividades de voluntariado a través de los medios de comunicación, Gobierno e instituciones. "El conocer su real impacto y la relevancia que tiene el ayudar a otros hoy y a futuro, tiene el potencial de generar una respuesta positiva en las personas", asegura.
Al parecer el compromiso en ayudar a otros también tiene que que ver con un asunto generacional. A nivel mundial, los segmentos que tienen mayor relación con el trabajo voluntario son los más jóvenes. Diagnóstico que también se observa también en Chile, señala Carreño, mientras en los segmentos entre 18 y 29 años un 34,5% realiza voluntariado, en los mayores de 50 años esta cifra disminuye significativamente a un 22%.
"Esto se relaciona con la ocupación de estos segmentos, pero también responde a qué tan conectados, informados y conscientes se encuentran con las problemáticas y necesidades de la sociedad de hoy", destaca Carreño.
La relevancia social del voluntariado, es innegable, agrega, en un escenario global que muestra decrecimiento en la felicidad de las personas.
La investigación sobre el trabajo voluntario se aborda como parte de una investigación más macro que profundiza en la felicidad de los países. Y en este contexto, el rol de los voluntarios se vuelve más crucial en el objetivo de mantener a nuestra sociedad unida, empática y preocupada del desarrollo de quienes más lo necesitan. "El hecho de ayudar a otros no solo beneficia al que recibe la ayuda, se ha demostrado que los voluntarios también mejoran sus niveles de bienestar. Es propio de la naturaleza humana sentirse bien luego de ayudar a alguien que está en una situación de necesidad", recalca.